Entre lo utópico y lo verdadero
Por Claudia Guerrero Martínez
14 de septiembre del 2022
Alcaldes hacen el ridículo y hasta desfilan en evento en Otatitlán bajo las órdenes del secretario de Gobierno Eric Cisneros
En Veracruz, muchos presidentes municipales permiten regaños, amenazas, cobro de moches, imposición de comercializadoras y hasta la entrega de obra por órdenes del secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos. Lo que ahora también aceptan es ridiculizarlos, obligarlos a participar en papaquis y los funcionarios municipales también integrarse a deslucidos desfiles. El terrible Eric denigra la dignidad de estos munícipes, quienes creen que el llamado “Bola 8” cumplirá con sus promesas, cuando no respeta ni al propio gobernador de Veracruz.
El pasado sábado, en un evento realizado en el municipio de Otatitlán, lugar donde es oriundo Eric Cisneros y tiene una obsesión por darle trayectoria, cuando es una zona de migración de mexicanos y centroamericanos que viajan a los Estados Unidos y plaza controlada por grupos del narcotráfico. Este fin de semana, alcaldes de varios municipios llevaron a sus trabajadores para participar en un presunto desfile de comitivas, las cuales sobresalieron las de Coatepec, Alto Lucero, entre otros, contabilizando cerca de 50 Ayuntamientos presentes, ante la amenaza de este secretario de Gobierno, quien hace las veces de titular de Turismo, jardinero y hasta lanchero, recordando su fracaso en Tlacotalpan con barcos habilitados como cantinas.
Del Ayuntamiento de Coatepec, sobresalió el alcalde Raymundo Andrade Rivera y era acompañado por el contralor municipal Arturo Mondragón, quien custodiaba al presidente municipal coatepecano a todas partes, como si fuera su dama de compañía. El festejo en Otatitlán era por un festival con trajes típicos. Lo interesante es que Arturo Mondragón es herencia de Arely Bonilla y ella lo incrustó en la administración pasada del presunto “panista” Enrique Fernández y durante esta administración, Arturo Mondragón tampoco salía de la oficina del panista aliado al Bola 8.
Además, el mismo contralor municipal está desplazando a la síndica Linda Rubí, quien llegó por el PVEM y al regidor de MC Edson Corona, quien en un principio estuvo muy pegado al alcalde, pero al parecer a Arturo Mondragón no le agradaba compartir la atención de Raymundo Andrade Rivera. La pregunta obligada: ¿Qué opinarán los morenos coatepecanos?
Por su parte, el alcalde de Alto Lucero se pone como tapete y hasta le gusta hacer el ridículo. Luis Vicente Aguilar Castillo, alias “Chentín” también bailó y se disfrazó de jornalero para el desfile organizado por Eric Cisneros. Hasta bailó frente al pódium para que le aplaudiera el conocido como Bola 8. No ha quedado claro qué beneficio obtuvieron los municipios y sus ciudadanos con este papaqui participando funcionarios municipales y hasta alcaldes que se convierten en serviles lacayos de un secretario de Gobierno que se irá muy pronto.
Y mientras el presidente municipal de Alto Lucero Luis Vicente Aguilar Castillo baila y baila, no atiende a su organigrama, como tener de tesorero a un ingeniero, cuando debería ser contador. Y se evidenció su carrera universitaria por el mismo alcalde en la presentación de sus colaboradores en el video con la liga: https://www.facebook.com/luisvicente1002/videos/736953420701201/?extid=NS-UNK-UNK-UNK-IOS_GK0T-GK1C&ref=sharing incumpliendo con una responsabilidad legal y administrativa.
Triste tener a una marioneta de alcalde, quien obedece todo lo que le diga el Bola 8, como seguirlo a todos lados, como lo hizo en Papantla o a Tlacotalpan, sin atender las necesidades de sus ciudadanos en Alto Lucero. Y lo peor, hace el ridículo. En el festival en Otatitlán puso a bailar a su director de Obras, al secretario particular del alcalde de Alto Lucero, al director de Cultura y al tesorero, contabilizando cerca de 40 empleados municipales del Ayuntamiento de Alto Lucero. Y todo para darle gusto y quedar bien con el secretario de Gobierno, quien gasta recursos públicos estatales para sus festivales, como si los dineros le pertenecieran.
Cabe mencionar que el alcalde Luis Vicente Aguilar Castillo compró un espacio en la revista Municipalidades, negocio del director de INVEDEM, Rafael Alejandro Castillo Zugasti y el pago de la inserción es un misterio, sin informar al Cabildo. Además, ante tanto absurdo, “El Chentín” realizó un evento del Partido del Trabajo en Veracruz obligando a todas las mujeres del Ayuntamiento a asistir, pues de lo contrario las corría.
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