* Su intención: Darle esplendor a Boca del Río
* Yo puedo ver a mis hijos a los ojos, porque nunca me he robado un peso
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
Alejandro Cossio Hernández se retiró de la política hace 14 años, cuando sintió que se le daba la espalda a los verdaderos panistas al ofrecerle la candidatura del Partido Acción Nacional (PAN) al gobierno del estado a Miguel Ángel Yunes Linares, quien entonces era el director del ISSSTE en el periodo presidencial de Felipe Calderón.
Hoy Alejandro Cossio retorna a la política, buscando la candidatura a la presidencia municipal de Boca del Río, en un panorama muy complejo, pero con una visión muy solida de sus razones. Las dos principales:
– Oponerse a que los Yunes de El Estero mantengan su cacicazgo político sobre Boca del Río, el cual tienen como su coto personal de negocios.
– Darle resplandor a Boca del Río, como un municipio con un gran potencial de desarrollo turístico, comercial y hasta industrial, con impacto en el estado de Veracruz. en todo el sureste del país, e incluso en todo México.
El pastelazo de la discordia
Fue en 2010, el 19 de enero, cuando se dio el “pastelazo” por parte de Felipe Calderón, quien era el presidente de la República, al entonces titular del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes Linares.
Ese día se conmemoraba el 50 aniversario de la creación del ISSSTE y al momento de partir un pastel, Felipe Calderón pidió la “mordida” al pastel y Miguel Ángel Yunes se inclinó para hacerlo y en ese momento, en un acta de camaradería, Calderón lo empujó sobre el pan conmemorativo.
Y por si había dudas de la intención, después, desde Los Pinos, los voceros presidenciales dijeron que era la señal para convertirlo en candidato del Partido Acción Nacional a la gubernatura de Veracruz, lo cual se hizo.
Ese fue el año y la razón por la que Alejandro Cossio dejó el PAN y la política.
Más, finalmente Yunes Linares fue derrotado ese año por Javier Duarte.
Pero la desaveniencia de Alejandro Cossio con Miguel Ángel Yunes viene de las épocas en que el segundo era secretario de Gobierno en el estado de Veracruz, con Patricio Chirinos, de 1992 a 1997, cuando hizo una persecución contra los panistas bastante intensa.
Aún con ese antecedente, en 2010 a Yunes Linares lo designan candidato al gobierno de Veracruz por intervención de Felipe Calderón, presidente de la República, y de su esposa, Margarita Zavala, con el apoyo de Alejandro Vásquez Cuevas, el dirigente del PAN en Veracruz.
Hoy Alejandro Cossio decide regresar a la política “por qué creo que tengo la madurez como persona para poder rescatar a Boca del Río del olvido de sus gobernantes”.
Pero también para cerrarle el paso a un clan familiar que quiere seguir apropiándose de ese municipio, los Yunes de El Estero.
Y en ese sentido asienta: “Si un Yunes volviera a competir contra Cuitláhuac García, yo volvería a apoyar a Cuitláhuac, definitivamente”.
Alejandro Cossio fue un fuerte impulsor en 2018 en favor de Cuitláhuac García, sobre todo entre panistas y expanistas, así como entre empresarios de todo el estado.
Se opuso entonces a que los Yunes de El Estero establecieran su dinastía para gobernar la entidad y hoy quiere romper con el cacicazgo que mantienen en la zona conurbada de Veracruz y Boca del Río.
Vaya, en 2018 fue notorio el reloj gigante que plantó en Plaza Lerdo, frente al palacio de Gobierno, en cuenta regresiva por los días que faltaban para que terminará el gobierno de Miguel Ángel Yunes.
Darle esplendor a Boca del Río
Hoy Alejandro Cossio, en su retorno a la política, tiene como visión convertir a la ciudad costera en un polo de desarrollo para Veracruz, con una visión de impulso comercial, de servicio, turístico y hasta industrial, por su ubicación estratégica como punto de confluencia de todo el estado, ruta hacia el sureste del país y punto de conexión entre el sur y el norte de México.
“Tengo propuestas para devolver el orgullo a los boqueños. Boca del Río tiene lo mejor de todo México, incluyendo su gente, sus comidas y sus tradiciones”, puntualiza.
“Boca del Río tiene la ubicación perfecta para que con vuelos a los aeropuertos de la Ciudad de México, a Houston y a Panamá, se conecte a todo el mundo. Vamos a poner a Boca del Río en boca de los operadores turísticos de Canadá y Estados Unidos, para que recibamos vuelos diarios de ambos países”, sintetiza, como una de las visiones de crecimiento que tiene para el municipio.
Ante la mención de que eso quiere, la pregunta es:
– ¿No está volando muy alto?.
Y la respuesta:
“Por supuesto. Pero ese es el objetivo. Como alcalde vamos a pedirle al cabildo que no se le cobre un solo peso a los emprendedores y a los empresarios que se instalen en nuestro municipio y voy a conseguir el apoyo de los Congresos local y federal para que Boca del Río sea un municipio con «tasa cero» para atraer a los corporativos”.
Y esos corporativos serán los que atraigan más desarrollo para el municipio y para la entidad.
Pero también aclara que su visión no es beneficiarse del cargo, porque: “Siempre he creído que un servidor público es eso, un «servidor» del ciudadano”.
Y lo dice enfatizando la frase «servidor del ciudadano».
Por eso también habla de lo que se podrá hacer en favor de la población: “Quiero que la niñez de Boca del Río sea el eje rector de las acciones, recuperando las escuelas, los bebederos públicos con agua potable, los espacios para el deporte y la educación artística”.
Más también tiene en la mira un problema sustancial del municipio y de la zona: la movilidad urbana.
“Las colonias de Boca del Río hoy son colonias dormitorio, por qué las personas deben salir a trabajar a la Riviera Veracruzana y a Veracruz. De ahí que como autoridad municipal deberemos aplicarnos a mejorar la movilidad y el rescate económico del municipio”.
Yo puedo ver a mis hijos a los ojos, porque nunca me he robado un peso
Alejandro Cossio después de que se retiró de la política en 2010 se dedicó a la vida empresarial, sobre todo en el ramo de la salud, en el cual tiene el orgullo de “haber logrado que productos fabricados en México se exporten”.
Ese es un sector que conoce bastante bien y del cual está seguro que su principal problema “es el exceso de corrupción”.
Remarca que puede hablar de corrupción en el sector, sin problema alguno, porque su actuar ha sido siempre honesto, tanto que asegura que “lo más importante en mi vida son mis 5 hijos y los puedo ver a los ojos por qué nunca me he robado un peso”.
Vaya, para reforzar que sus hijos son lo más importante, puntualiza que “siempre he dado y daría la vida por ellos”.
Alejandro Cossio hoy está dispuesto a enfrentar el cacicazgo de los Yunes en Boca del Río, para cerrarles el paso y para desarrollar ese municipio y el estado.
Lo suyo no es ambición de poder, si no afán de servicio para hacer crecer el municipio y mejorar las condiciones de vida de su población.
