*Anda como fiera ante el fracaso de Reforma Eléctrica
*¿Revocación? La gente prefirió recordar al otro Mesías
EL LUNES 11 o martes 12, cuando se discuta la criticada Reforma a la Ley Eléctrica del Presidente Andrés Manuel López Obrador en la Cámara Baja del Congreso, es probable que ésta no sea aprobada porque conseguir los 57 votos que le faltan a MoReNa y sus aliados en medio de las calumnias cotidianas del titular del Ejecutivo Federal a sus adversarios, a los que acusa, impunemente, de todo en sus mañaneras llamándolos corruptos, mentirosos, lamesuelas, saqueadores, metiéndose, incluso con familiares de ex magistrados y ex servidores públicos como si se tratara de Dios padre que todo lo puede, hasta recurrir a la infamia, no será cosa fácil, y menos cuando “en la cúspide del pinche poder” reta, incluso a Estados Unidos, su principal socio comercial aduciendo que el caso de aprobarse la reforma y hay acciones de tipo jurídico por parte de los vecinos del norte, “nosotros también haríamos lo propio porque somos un país independiente, libre” (y tiene razón, pero se olvida de algo que se llama diplomacia, creada como mecanismo de cortesía para resolver los conflictos). Y como para rubricar lo anterior, el viernes dejó con un palmo de narices al embajador estadounidense Ken Salazar que llegó a Palacio Nacional a tratar de entrevistarse con él, pero AMLO, cuando le dijeron que el “gringo” se encaminaba a verlo, apresuró su salida para no recibirlo, lo que ya es considerado una descortesía, porque ni modo que don Kenneth Lee Salazar (verdadero nombre de Ken) se haya presentado sin previo aviso, él que es un conocedor de la diplomacia de gran altura. AMLO, simple y llanamente, voluntarioso como suele ser, se negó a recibirlo argumentando que viajaba a Nayarit, y al embajador no le quedo sino declarar a su salida que México y Estados Unidos tienen una buena relación que, además, será para siempre, y para no quedar mal, indicó que acudió a Palacio Nacional a entrevistarse con el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
APENAS 24 horas antes, Salazar advirtió que de aprobarse, la Ley de la Industria Eléctrica abre la puerta a litigios sin fin que generarían incertidumbre y obstruirían la inversión, a lo que López Obrador respondió que si bien puede haber acciones de tipo jurídico, “nosotros también haríamos lo propio porque somos un país independiente, libre”, y aclaro a su manera que “no hay ninguna violación a ningún tratado, somos muy respetuosos de la libertad de expresión, aún en exceso, y que todo mundo pueda manifestarse”. Y ya luego, haciendo referencia al diálogo que sostuvo con Ken Salazar, refirió: “no voy a ir a decirle al presidente Biden que por qué no cumple su compromiso de regularizar a los paisanos migrantes, eso no lo voy a hacer. Él ya lo propuso y no lo ha cumplido, pero no voy a acudir a organismos o paneles internacionales. Llevamos muy buena relación con Ken Salazar, pero entiendo que hay presiones de ellos mismos, en EU existe la costumbre de que los diputados, senadores, políticos, reciben dinero de las corporaciones empresariales, yo no voy a calificar si eso está bien o mal, pero así es. Si hay una empresa que se siente afectada, acude al departamento de Estado, esa es su política, aseguró el mandatario”. Como fuera, Ken Salazar se retiró de Palacio Nacional con un palmo de narices, y al irse destacó ante los medios la unión entre México y Estados Unidos, la cual, dijo, es para siempre porque las economías están integradas y se avanza por buen camino, aunque el hombre se observaba sorprendido por la grosería de que había sido objeto por parte de quien comienza a degradar la política convirtiéndola en autoritarismo.
PERO LOPEZ Obrador anda que no le calienta ni el sol ante la inminente derrota que sufrirá su reforma eléctrica en el Congreso de la Unión, y por las dizque presiones de Estados Unidos, y por ello les ha dejado en claro que si no se aprueba la Reforma Eléctrica presentará una iniciativa que modifique la ley minera para asegurar que el litio sea de la Nación y no de empresarios extranjeros, sobre todo de Estados Unidos. Por ello dice: “si se llevara a cabo una traición tenemos el recurso de la reforma de la ley minera, que no necesita de dos terceras partes, es mayoría simple y tendríamos los votos para que el litio sea un mineral de la nación. En caso que puedan más los legisladores que representan los intereses creados, quiero que sepan que de todas maneras no van a poder disponer del litio, porque de eso no se habla, pero eso les importa mucho… que no se estén haciendo ilusiones, el litio va a seguir estando en el mercado, expuesto a que se apropien de este mineral estratégico. Y por si están pensando declararla inconstitucional, con más razón los ministros de la Corte van a pronunciarse a favor del interés nacional, a favor de México”, reitera.
LA POSTURA del Presidente es, sin duda, un preludio de lo que viene: su reforma a la Ley Eléctrica no será aprobada por los diputados de oposición, y los de su partido, incluidos los aliados no podrán lograr la mayoría calificada que se requiere, y en ese contexto, busca en el litio consumar su venganza. AMLO es un hombre de revanchas, rencoroso e irreconciliable, y buscará siempre la manera de exhibir a sus adversarios, por lo que no se descarta que el siguiente paso sea publicar los nombres de los diputados Federales que votarán en contra de la iniciativa, mostrándolos al “pueblo bueno” como los grandes traidores de la patria, sin menoscabo de ponerlos en riesgo ante la sociedad. El con saciar su sed de enconos estará más que satisfecho.
POR LO demás, la inútil consulta para la revocación de mandato, los ciudadanos conscientes de que se trata de un capricho amlista no salieron a votar, y en ese tenor o se fueron de día de asueto a alguna playa, o los más conservadores acudimos a misa, al llamado domingo de Ramos, celebración religiosa en la que la mayoría de las confesiones del cristianismo conmemora la entrada de Jesucristo en Jerusalén, dando inicio a la Semana Santa. La fiesta conmemora la Entrada triunfal en Jerusalén, un evento mencionado en cada uno de los cuatro evangelios canónicos. El Domingo de Ramos marca el primer día de la Semana Santa. Para los seguidores del cristianismo de Nicea, es la última semana de la temporada solemne cristiana de Cuaresma que precede a la llegada de la Pascua, pero en la mayoría de las iglesias litúrgicas, el Domingo de Ramos se celebra con la bendición y distribución de ramas de palma o las ramas de otros árboles nativos, que representan las ramas de palma que la multitud esparció frente a Cristo mientras él entraba en Jerusalén. Y es que perder el tiempo para satisfacer el ego del Mesías, era, sin duda, una necedad. OPINA carjesus30@hotmail.com