Carbonell, apellido que cimbró en 1974 y que Dante impulsa

’03/09/2025’
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*Sergio Gil cayó de la gracia de Delgado Rannauro por ansioso

*Desapariciones y crímenes de mujeres al alza en Veracruz y el País

 

MOVIMIENTO CIUDADANO se perfila como el partido que hará contrapeso al Movimiento de Regeneración Nacional tanto en Veracruz como en el resto del País, y acaso el 2027 siente un precedente que lo ratifique como la segunda fuerza política del Estado, ya que en Mayo tendrá tribuna legislativa el actual dirigente Estatal, Luis Carbonell de la Hoz, y un año después estaría disputando la diputación Federal que le coloque en el umbral de tareas superiores, toda vez que Sergio Gil Rullan, a quien sustituyó por instrucciones de Dante Alfonso Delgado Rannauro, ha perdido vigor desde el distanciamiento –de seis meses- que tuvo con el fundador ese instituto, desde que en 2024 optó por promocionarse como precandidato a la Gubernatura, brincándose las trancas de Delgado Rannauro, algo que el ex Gobernador cuatrienal no soportó y ordenó su relevo. Y es que Gil Rullan es un político que tiene mucho parecido con Javier Duarte de Ochoa, y al igual que este, que terminó por saltarse a su hacedor, el ex Gobernador Fidel Herrera Beltrán, el robusto diputado Federal hizo lo propio con Dante Alfonso que debió retirarle el habla durante medio año para ponerlo en su lugar y, de paso, mandar un mensaje a otros acelerados en torno a quien manda en MC, pese a la enfermedad que le aqueja. Carbonell de la Hoz es suplente del diputado local y exalcalde de Boca del Río, Adrián Sigfrido Ávila Estrada, y en mayo del 2026 habrá de sustituirlo y, seguramente, dará nuevamente lustre al apellido de su abuelo, el subsecretario de Gobierno del siempre bien recordado ex Gobernador Rafael Murillo Vidal, el mismo que en dos ocasiones estuvo a punto de ser candidato a la Gubernatura, inicialmente en los primeros meses de 1974, cuando logró levantar a seguidores que lo aclamaron como probable abanderado, hasta que en abril de aquel año el entonces Presidente nacional del PRI, Jesús Reyes Heroles le cortó las alas con un pronunciamiento que lo sacó de la jugada: “yo como veracruzano no he votado por él”. Y aunque el golpe letal se lo acreditan al oriundo de Tuxpan, lo cierto es que Carbonell de la Hoz fue atajado por el mismísimo Presidente Luis Echeverría Álvarez que tenía entre sus planes la postulación de su compadre Rafael Hernández Ochoa, que del 1 de diciembre de 1970 a 1973 se desempeñó como Secretario del Trabajo, y el  4 de mayo de 1974 fue elegido por el Partido Revolucionario Institucional como candidato a la Gubernatura de Veracruz. A Reyes Heroles, Echeverría lo uso para sus planes, luego de que en 1972, el entonces presidente llamó a Reyes Heroles para que encabezara el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, pero el más grande ideólogo de ese instituto, lejos de plegarse plenamente a los deseos de Echeverría, se opuso firmemente a los intentos reeleccionistas de este, algo que expresó en un discurso el 5 de febrero de 1975, y fue esa oposición lo que marco su salida de la dirigencia nacional.

 

LUIS CARBONELL es nieto de don Manuel Carbonell de la Hoz, un hombre cercano y muy querido por don Fernando Gutiérrez Barrios que era quien lo impulsaba, de tal suerte que, el tuxpeño Reyes Heroles era contrario a Gutiérrez Barrios. Dicen las crónicas de la época que, en realidad, le calentaron la cabeza al Presidente Echeverría –entre otros Augusto Gómez Villanueva- con la versión de que Carbonell fue quien hizo explotar la avioneta en la que viajaba el entonces líder cenecista Alfredo Vladimir Bonfil, y en los días posteriores al primer destape es famosa la actuación de una señora que, en Los Pinos, ante Echeverría, en reunión gestionada por la señora Teresita Peñafiel de Hernández Ochoa ante su comadre María Esther Zuno de Echeverría, gritó que cómo era posible que la candidatura le fuera dada al asesino de Bonfil. Por ello, el sábado 20 de abril de 1974 Carbonell, “por disciplina”, renunció a la candidatura y a la Subsecretaría de Gobierno. El domingo Augusto Gómez Villanueva llega a Xalapa, y en esos días se publica un desplegado a favor de Carbonell, en que se habla de presiones inenarrables, de farsas politiqueras monstruosas y chantajes. Lo firmaron, entre otros, Roque Spinos (a quien también le acreditaban el asesinado de Bonfil), Alejandro Soto López, Leopoldo Castillo, Juana Consuelo Méndez y Arnulfo García Rangel. El martes 23 de abril vino Echeverría a Veracruz. Hay libertad y democracia en Veracruz, expresó, y el jueves fue el otro destape a favor de Rafael Hernández Ochoa, cuya precandidatura fue oficializada al día siguiente.

 

POR ELLO la importancia de que Luis Carbonell, el nieto de aquel joven político que fue atajado en su vertiginosa carrera, rescate el apellido de don Manuel Carbonell de la Hoz, quien en 1986 pudo haber sido el Secretario de Gobierno de don Fernando Gutiérrez Barrios y, tal vez el sustituto en la Gubernatura en 1988, cuando Gutiérrez Barrios fue invitado por el Presidente Carlos Salinas de Gortari a asumir la Secretaria de Gobernación. Pero el destino no lo quiso así. Semanas antes don Manuel falleció, cuando todo parecía indicar que, finalmente, el PRI saldaría una deuda con él. Luis, su nieto, es un joven profesionista con gran experiencia como abogado egresado de la Libre de Derecho, y quien despunta para tareas superiores, y acaso en 2027 sea diputado Federal, luego de entregar buenas cuentas este año al frente de la dirigencia Estatal de Movimiento Ciudadano que logró lo inusitado: posicionarse como la segunda fuerza política en Veracruz, con casi 600 mil votos y triunfos en casi 50 municipios, superando por 300 mil votos al PRI y más de 300 mil al PAN, lo que le devolvió la vida a Dante Alfonso Delgado Rannauro que no solo lo ratificará como dirigente sino que le permitirá año y medio al frente de la diputación que detenta Adrián Ávila, de quien es suplente, y quién quiso hacer berrinche, pero lo paró en seco Delgado Rannauro. A ver qué pasa.

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EN EL Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas –que se conmemoró el 30 de agosto-, volvieron a surgir cifras crudas en torno a ese fenómeno. Por lo pronto quedó en claro que en México persiste una crisis de desapariciones forzadas que no solo golpea a la población en general, sino que impacta de manera particular a mujeres defensoras y periodistas que, para variar, enfrentan riesgos que incluyen amenazas, violencia sexual y hostigamiento por su labor. Y es que, de acuerdo al Organismo de la Sociedad Civil para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas (Espacio OSC), desde el 1 de enero de 2016 han sido asesinadas o desaparecidas 63 personas defensoras, periodistas y colaboradores de medios vinculados a esa labor: 15 mujeres y 48 hombres. De ellos, 17 eran personas indígenas; en cuanto a su profesión, 37 se dedicaban a la defensa de derechos humanos, 25 al periodismo y una persona era colaboradora. El organismo también documentó el asesinato de 25 personas buscadoras y la desaparición de otras siete, de las cuales tres permanecen sin ser localizadas. Por su parte, Amnistía Internacional reportó en julio de 2025 el homicidio de 15 mujeres buscadoras entre 2014 y 2025. Los estados de Guerrero, Guanajuato, Veracruz, Michoacán, Sonora, Jalisco, Estado de México, Oaxaca y Tamaulipas concentran los mayores índices de violencia, criminalización e impunidad en torno a la desaparición forzada, pese a que los Gobiernos de esas entidades tengan otros datos, o intenten cubrir el sol con un dedo…OPINA carjesus30@hotmail.com

 

 

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