Por Ángel Rafael Martínez Alarcón
La Universidad Veracruzana, con 80 años de presencia en la vida de los veracruzanos, ha sido fundamental en la construcción de un futuro mejor para México. Sin duda, uno de sus rectores más destacados fue el doctor Gonzalo Aguirre Beltrán (1908-1996), quien dirigió la institución entre 1957 y 1961. Durante su rectorado, la UV emprendió un proceso de internacionalización y fortaleció el área de humanidades con la creación de las carreras de Antropología e Historia, así como con la fundación del Museo de Antropología. Aguirre Beltrán, médico egresado de la UNAM en 1931, invitó a destacados humanistas —muchos de ellos jóvenes— a sumarse a este proyecto. En esta labor también tuvo un papel relevante el normalista José Luis Melgarejo Vivanco (1914-2003), entonces subsecretario de gobierno. El 30 de marzo de 1925, nace nuestro querido maestro y amigo Roberto Williams García
Trayectoria académica y contribuciones
Los primeros datos biográficos de Roberto Williams García aparecen en la Enciclopedia de México(publicada en varios tomos durante la segunda mitad del siglo XX). Según esta fuente:
Nació en Barra de Tampico, Tamaulipas, en 1925. Fue profesor de instrucción primaria (1945) por la Escuela Normal Veracruzana y etnólogo (1964) por la Secretaría de Educación Pública. Inició su carrera como ayudante en un estudio sobre la población totonaca de El Tajín (1948). Colaboró en la investigación Antropología física de Veracruz (1950-1956), donde participó en la recolección de datos somáticos y muestras de sangre entre indígenas de la Huasteca meridional y totonacos de Papantla (véase “Distribution of Hereditary Blood Antigens among The Maya and Non-Maya Indians in Mexico and Guatemala”, The American Journal of Physical Anthropology, marzo de 1959). Además, contribuyó al descubrimiento de los lienzos prehispánicos de Tuxpan en Tihuatlán y documentó el culto al Sacerdote de Las Limas, escultura robada del Museo de Jalapa y recuperada por el gobierno mexicano.
Williams García también incursionó en el cine etnográfico con documentales como Carnaval en la Huasteca (1960), https://youtu.be/orM8TVWWwqI?si=9HS6-IQ8wfkWZ92B Boda en el cerro (1973) y Uso ritual de la Santa Flor (1973). Entre sus obras escritas destacan:
- Los tepehuas (Xalapa, 1963).
- Mitos tepehuas (1972).
- La ruta de la vainilla (folleto, 1969).
- El mito de una comunidad indígena (tesis).
- Monografías como Introducción a las culturas del Golfo, Otomíes de la sierra de Puebla, Los popolucas del sur de Veracruz, Los huastecos y Los totonacos (todas de 1961).
El Diccionario Enciclopédico Veracruzano —editado en papel durante el gobierno de Patricio Chirinos (1992-1998) y posteriormente digitalizado por la UV— resume su labor:
Fue investigador de la Universidad Veracruzana, delegado de Asuntos Indígenas (1952-1958) y mantenedor del Programa de Desarrollo Cultural de los Grupos Étnicos en Veracruz (SEP, 1979). Colaboró en revistas científicas y periódicos, dejando un legado invaluable en la antropología mexicana.
Una figura más allá de la academia
Pese a sus contribuciones, aún falta una biografía integral que explore no solo su faceta académica, sino también su impacto cultural y político.
Mi relación con Williams García comenzó en Xalapa, cuando a los 16 años me involucré en el Instituto de Intercambio Cultural México-URSS “José Mancisidor“. Allí, junto al lingüista Carlo Antonio Castro Guevara (1926-2010), decano de la Facultad de Antropología de la UV, tuve el privilegio de conocerlo. Era un hombre de presencia imponente pero de gran calidez, empático y carismático. Nuestra amistad perduró a través de los años, en coincidencias culturales y políticas.
En 1968, Williams García fue uno de los líderes del movimiento estudiantil en la UV, que enfrentó severas dificultades financieras. Sufrió represión policial —incluso su casa en la calle González Ortega fue marcada con una placa alusiva—. Dos décadas después, en 1988, se sumó a las protestas contra el fraude electoral que dio lugar al Partido de la Revolución Democrática (PRD), apoyando la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (1934).
Legado y homenaje
Roberto Williams García era un referente en la vida cultural veracruzana: articulista, docente, investigador y activista. Su estilo desenfadado contrastaba con la solemnidad académica; en presentaciones de libros, evitaba discursos rígidos y prefería comentarios espontáneos, siempre con humor y agudeza.
En este centenario de su natalicio, el Museo de Antropología de la UV le rinde homenaje con una exposición fotográfica en sus rejas. Una justa celebración para quien dedicó su vida a entender y dignificar las culturas indígenas, dejando huella en la historia de Veracruz y México.