“Errar es humano, perseverar en el error es diabólico.” – San Agustín de Hipona.
“Nadie escarmienta en cabeza ajena” señala un refrán popular.
Empleado para advertir que la experiencia ajena no es suficiente para desengañarnos, por lo que sólo aprendemos de nuestro errores o desgracias, es el mejor ejemplo para señalar lo que nuevamente ocurre en el Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz (Orfis), en donde su titular Delia González Cobos no termina de aprender de sus errores.
Al parecer la proclividad de la responsable del Orfis para inmiscuirse en manejos y negocios turbios son el común denominador de su actuar en la responsabilidad que le entregaron las y los legisladores locales.
Una vez más, Delia González falta a la verdad y vuelve a las andadas, tras descubrirse todo el entramado para negociar con los ayuntamientos y maquillarle las cuentas públicas, razón por la cual debieron salir de pelada algunos exfuncionarios del referido organismo, mismos que solicitaron maletas repletas de dinero que afirman fueron a terminar en manos de su padrino y aliado político el secretario de Gobierno, E. Patrocinio Cisneros Burgos.
Aunado a ello, tuvo que enfrentar el deshonroso rechazo de la Cuenta Pública 2021, misma que la Comisión de Vigilancia del Congreso Local le rechazó y recientemente presentó para su nueva aprobación.
Ahora una vez más vuelve a las andadas al ser denunciada por un severo conflicto de interés, al descubrirse que la esposa de su actual Contralor Interno, Emmanuel Vázquez Jiménez, habría sido beneficiada con contratos multimillonarios en la dependencia.
Es así como se pudo comprobar que Eva Yalila Leal Castellanos esposa del citado funcionario, recibió los contratos 22/12/2020, 16/02/2021, 05/03/2021, 18/05/2021 y 20/12/2021 con adjudicaciones directas donde ella aparece como proveedora de alimentos del organismo.
Ahora se espera que la propia Delia González Cobos actúe y tome cartas en el asunto tras el encubrimiento que realizó. La pregunta aquí será ¿actuará y sancionará al funcionario separándolo del encargo?, ¿cancelará los contratos concedidos?, ¿sancionará económicamente a Eva Yalila Leal Castellanos ante el evidente conflicto de interés?
Por lo pronto se sabe que la Comisión de Vigilancia que preside el diputado local, Rafael Fararoni Magaña prepara las denuncias correspondientes que habrán de ser presentadas en la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGE) para que, con carpetas de investigación abiertas, se llame a cuentas a la desleal funcionaria, que al parecer no aprendió de los errores anteriores.
¿Acaso Delia González Cobos se sabe protegida por su padrino político y por ende por la titular de la FGE, Verónica Hernández Giandáns que continúa haciendo y deshaciendo cuanto negocio se le atraviesa a sus anchas en el Orfis?
Al tiempo.
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