En memoria de Fausto Vega Santander (1923-1945), defensor de la democracia occidental hace 80 años
Por Ángel Rafael Martínez Alarcón
El 1 de junio de 2025 marcará un punto de inflexión en la historia de México: el día en que se consumó el fraude electoral más escandaloso en dos siglos de vida republicana. Por primera vez, y violando todo precedente histórico, el Poder Judicial fue sometido a una farsa electoral orquestada por el gobierno de la autodenominada *”Cuarta Transformación”*. Millones de mexicanos no logramos defender al INE antes de que fuera secuestrado por el Gobierno.
Un pasado de impunidad
Manuel Andrés López Obrador tenía razón al denunciar la corrupción del sistema judicial mexicano, pero su solución ha sido peor que la enfermedad. Su narrativa de víctima omite que él mismo se benefició de esa impunidad: desde el asesinato de su hermano José Ramón en 1969 —caso nunca esclarecido— hasta sus actos de resistencia ilegal, como las tomas de instalaciones de PEMEX o el desafuero durante su gestión en la Ciudad de México. Tampoco hubo justicia para sus denuncias infundadas de fraude en 2006, que culminaron en bloqueos y violencia. En el sexenio del 2018-2024, tuvo como política pública violentar el Estado de derecho. El *Mesías Trópical* destruyó todo lo construido en los últimos 80 años.
El “Plan C”: comunismo, corrupción o caos, calamidad, carencia, crimen
En mayo de 2024, López Obrador anunció su *”Plan C”*, un golpe institucional disfrazado de reforma judicial. La *”C”* bien podría significar comunismo, corrupción (política de Estado bajo su gobierno) o caos. Con esta reforma, el Ejecutivo federal ha convertido al Poder Judicial en un apéndice de sus intereses, eliminando su independencia y sometiéndolo a elecciones amañadas donde los resultados ya estaban decididos.
Un fraude sin precedentes
Morena ha superado todos los fraudes históricos del PRI, que duraron 80 años:
– **Manipulación legal:** Reformas constitucionales aprobadas sin consenso, como la eliminación de contrapesos judiciales.
– **Control del INE:** Órganos electorales cooptados por operadores morenistas, como Guadalupe Taddei Zavala, replicando las prácticas priistas de ante de 1988.
– **Logística viciada:** Menos del 50% de las casillas instaladas, boletas confusas y acarreo de votantes, financiado por *Morena*. Taddei Zavala, con estrechos vínculos con Morena, viola el espíritu del órgano electoral ciudadano.
– **Candidatos afines:** 437 aspirantes judiciales ya tenían resultados predeterminados por “razones matemáticas y de género”.
Como advirtió el expresidente de México (1994-2000), Ernesto Zedillo Ponce de León, esta reforma “arrasa con el Poder Judicial como entidad independiente y lo pone al servicio de quienes concentran el poder político”. Zedillo, el primer presidente que supo separar el gobierno del PRI, logró la victoria de la oposición en 1997 y la pérdida de la presidencia en 2000.
El manual del autoritarismo
El gobierno ha seguido al pie de la letra el *playbook* de las dictaduras:
- **Control mediático:** Campañas de desprestigio contra críticos y monopolio de la narrativa oficial.
- **Clientelismo:** Uso de programas sociales para comprar votos.
- **Militarización:** Entrega de funciones civiles al Ejército.
- **Persecución:** Leyes para silenciar a la oposición, como la *”supremacía constitucional”*, que impide revisar reformas.
La farsa del 1 de junio
La elección judicial fue un simulacro:
– **Participación mínima:** Se estima que solo votó entre el 1% y 2% del padrón, con boletas tan complejas que incluso la ministra Loretta Ortiz admitió: *”Sí, está complicado”*. Loretta Ortiz, que presumió su militancia morenista y fue fundadora del órgano.
– **Candidatos cuestionables:** Entre ellos, personas vinculadas al narcotráfico y operadores políticos disfrazados de observadores. Morena quería enviar a 25 mil observadores electorales, los *mapaches*, y el INE fue de las pocas instituciones que denunció estas prácticas.
– **Opacidad:** Sin conteo rápido, sin publicación de resultados por casilla y con un INE impedido de declarar ganadores.
Conclusión: México, de la democracia a la dictadura
El 2 de junio de 2025, Claudia Sheinbaum se convertirá en la gobernante más poderosa desde Santa Anna, pasando por Porfirio Díaz, Victoriano Huerta y laa presidencia imperial del PRI; con los tres poderes sometidos a su voluntad. Como sentenció Zedillo: *”Nuestra joven democracia ha sido asesinada”*. El próximo capítulo ya está escrito: elecciones de 2027 y 2030 bajo el mismo guion, hasta que Morena consolide una dictadura de partido único, con el Ejército como reserva para reprimir a las voces disidentes. No es casual que el nieto del General de División Marcelino García Barragán, secretario de la Defensa Nacional en el sexenio de Gustavo Díaz Ordaz —el presidente tan odiado, con odio jarocho, de Claudia Sheinbaum—, sea Javier García Paniagua, ex comandante de la Dirección Federal de Seguridad, bajo el mando del militar Fernando Gutiérrez Barrios, también presidente del CEN del PRI. Además, Omar García Harfuch, el super policía de la 4T y candidato a la presidencia en 2030.
México, otrora faro de América Latina, hoy se une al club de las autocracias: Venezuela, Cuba y Corea del Norte. El T-MEC podría ser la próxima víctima. La pregunta no es si habrá consecuencias, sino cuánto tiempo pasará antes de que el pueblo mexicano diga ¡basta!
Un fantasma recorre a México desde diciembre de 2018: el fantasma de los ídolos del *”Mesías Trópical”*: Adolfo Hitler, Benito Mausolín, Mao Zedong, Kim Il Sung, Pol Pot, Fidel Castro, Che Guevara, Idi Amin, Nicolae Ceaușescu, Hugo Chávez.
Claudia Sheinbaum, si tuviera un miligramo de inteligencia, amor al país y visión de estadista, habría rechazado esta farsa democrática y habría respetado el Estado de Derecho. En cambio, siguió los mandatos de su capo Manuel Andrés López Obrador, prefiriendo la felicitación en lugar de defender la institucionalidad.