Cada año es la misma película, basada en el mismo guion y en algunas temporadas con los mismos actores. Primero viene el escándalo: “Más de 3 mil millones de pesos desfalcan los ayuntamientos a la Cuenta Pública del 2021”. El siguiente acto es la amenaza: “En capilla ex alcaldes por presunto quebranto patrimonial”. Y el infaltable epílogo es el chance que les da el Orfis para “aclarar” sus anomalías que no son otra cosa que raterías.
Esta última parte del guion es la razón por la que casi todos los presidentes municipales le meten con fe la mano al cajón del erario, porque saben que las autoridades no les harán nada. Y si acaso los detienen, siempre tendrán manera de zafarse.
Hace años supe de un ex alcalde que acusado de embolsarse más de 50 millones de pesos y ante la inminencia de que lo enviaran a prisión, buscó al presidente de la Comisión de Vigilancia del Congreso local y le dijo. “La neta compadre no me robé cincuenta millones de pesos como dicen, nomás fueron cuarenta y de esos lo único que me quedan son diez que ahí están (y le enseñó dos maletas). Te los dejo; tu sabrás lo que procede”.
Y lo que procedió fue que el tipo salió incólume del atraco.
Se calcula que del 100 por ciento de los desfalcos cometidos cada año a las Cuentas Públicas de Veracruz, regresa al erario apenas el 8 o 9 por ciento de lo desfalcado. De ahí que (con sus muy destacadas excepciones), la gran mayoría de los munícipes roben sin medida y sin recato.
En este año, algunos de los ex alcaldes y ex alcaldesas que están “bajo el escrutinio de las autoridades” son:
Ernesto Ruiz Faldes, ex alcalde de Altotonga, que tiene un presunto quebranto a la Cuenta Pública del 2021 por más de 20 millones de pesos. Fernando Yunes Márquez ex alcalde de Veracruz, resultó con un presunto quebranto patrimonial superior a los 117 millones de pesos. Leticia López Landero ex alcaldesa de Córdoba, es señalada de un presunto quebranto financiero por 107 millones de pesos. En el ayuntamiento de Álamo faltan más de 96 millones de pesos que nadie sabe dónde los dejó el ex alcalde Jorge Vera Hernández.
En Tuxpan el quebranto es por 80 millones de pesos en el último año de Juan Antonio Aguilar Mancha. En Alvarado es por 65 millones durante la administración del ecologista Bogar Ruiz Rosas.
En el último año del morenista Hipólito Rodríguez, Xalapa tuvo un quebranto por 42 millones de pesos, mientras que en Coatzacoalcos fue de 33 millones, también en el último año del morenista Víctor Carranza Rosaldo.
Te reitero lector, apenas son una parte de los 212 alcaldes que tiene Veracruz. Una entidad en la que casi todos roban con una desfachatez de espanto. Y es que aparte de políticos, son cuatreros de cuello blanco.
Lo que llamó la atención fue que mientras estos ex munícipes fueron mencionados en conjunto en una nota informativa, a la ex alcaldesa de Tamiahua y actual diputada local por el PVEM, Citlali Medellín Careaga, le dedicaron una nota aparte como responsable de un presunto desvío por 11 millones de pesos.
Pero la legisladora respondió de inmediato.
Mediante un comunicado dio a conocer que su administración (2018-2021) realizó en tiempo y forma los procedimientos requeridos por el Orfis. “Sin embargo, tuvimos la negativa por parte de funcionarios de la actual Administración municipal, para certificar los documentos requeridos en el esclarecimiento de dichas observaciones”.
La legisladora agrega que esta negativa es una flagrante obstrucción y presunto incumplimiento de un deber legal por parte de los servidores públicos del actual Ayuntamiento tamiahuense. Y como está tipificado como delito, tomará acciones legales.
Hasta los neófitos en política saben que la “sugerencia” de destacar mediáticamente el presunto quebranto en la administración de Citlali viene de arriba y que hay mano negra. De todas maneras la funcionaria salió a aclarar.
Pero ¿qué onda con los demás ex alcaldes que están (ellos sí), bien embarcados con millonarios quebrantos que abultaron sus cuentas bancarias?
Sólo unos pocos, contadísimos (ex síndicos, ex tesoreros, ex regidores y en una de esas uno que otro ex alcalde), son los que pasarán una temporada en prisión mientras el dinero desfalcado se evaporará y no regresará al lugar de donde fue sustraído.
Otros quizá le hagan como el munícipe que devolvió el 20 por ciento de lo robado (porque se robó 50 millones) y se quedó con el 80 por ciento restante. O quizá recurran a hermanos o primos que son diputados o están en la Comisión de Vigilancia.
Verás lector que en eso va a terminar el arguende, mucho ruido y pocas nueces. Como sucede todos los años.
Zenyazen participa en trascendente jornada
El titular de la SEV, Zenyazen Escobar respondió al llamado del gobernador Cuitláhuac García y este domingo llegó al ejido Tula, en el municipio de Ángel R. Cabada, para participar en una trascendental jornada de la que dijo. “Crear conciencia ambiental y reforestar es vital, por ello hoy las y los maestros veracruzanos nos sumamos a la Segunda Jornada de Fabriquemos Agua Reforestando”.
En el evento coordinado por la Secretaría del Medio Ambiente, Zenyazen Escobar expresó que este tipo de acciones son importantes para el magisterio, pues además de contribuir en actividades que benefician a la población, se enseña a las y los estudiantes con el ejemplo.
La jornada se replica en 23 municipios de la entidad, con la finalidad de sembrar alrededor de 30 mil plantas en zonas estratégicas; en el caso de este municipio, en el ejido Tula se originan la cuenca Tecolapilla y el río Papaloapan.
