“El taxi: un lastre sin modernización en Veracruz”

’07/07/2025’
’07/07/2025’
’07/07/2025’
’07/07/2025’
’07/07/2025’
’07/07/2025’

“Las cosas no cambian; cambiamos nosotros”. – Henry David Thoureau.

El transporte público en la modalidad de taxi en Veracruz atraviesa por una profunda crisis estructural que se ha prolongado por más de quince años. Ciudades como Xalapa, Veracruz, Poza Rica, Córdoba, Orizaba y Coatzacoalcos continúan operando con tarifas que datan de mediados de la década del 2000, sin que ninguna administración estatal haya tenido el valor político de encarar una actualización necesaria.

La consecuencia ha sido un caos tarifario donde impera la ley del más fuerte: tarifas sujetas a la oferta y la demanda, cobros arbitrarios, supuestos perímetros de servicio y, en algunos casos, prácticas francamente abusivas por parte de algunos choferes.

Hoy, la gobernadora Rocío Nahle García ha lanzado un mensaje claro: ella sí le va a entrar al tema. Y no es menor. Regularizar las tarifas, modernizar el servicio e incluso depurar el padrón de concesiones representa uno de los retos más complejos del sector movilidad.

Los transportistas lo saben y, como era de esperarse, algunos ya han comenzado a lanzar amenazas de bloqueos si se intenta revisar o modificar el actual esquema.

Sin embargo, la gobernadora tiene no solo el respaldo legal para actuar, sino también el respaldo social. La ciudadanía está harta del desorden, del mal servicio y de la imposibilidad de saber cuánto debe pagar por un viaje.

Hay taxis sucios, inseguros, sin aire acondicionado, que se niegan a hacer recorridos cortos o que inventan tarifas de forma arbitraria. Es evidente que el modelo está agotado.

Nahle García tiene la facultad de revisar y derogar concesiones otorgadas —muchas de ellas entregadas de forma discrecional o sin criterios técnicos en sexenios anteriores— y con ello reducir el saturado parque vehicular que inunda las calles de las principales ciudades. Veracruz necesita menos taxis, pero mejor operados. Vehículos modernos, choferes capacitados y reglas claras.

Además, es momento de abrirle la puerta a las plataformas digitales que ya operan en otros estados con mayor eficiencia. Uber, DiDi, entre otras, pueden elevar la competencia y forzar a los concesionarios tradicionales a mejorar su servicio o salir del mercado.

La modernización del servicio de taxi no debe ser vista como una amenaza, sino como una oportunidad de devolverle dignidad al transporte público. El momento de actuar es ahora. Rocío Nahle tiene la oportunidad histórica de poner orden en un sector donde por años ha reinado el caos.

¿Se atreverá a dar el paso? Todo indica que sí.

 

Al tiempo.

 

astrolabiopoliticomx@gmail.com

“X” antes Twitter: @LuisBaqueiro_mx

Artículos similares

’07/07/2025’

Columnas Veraces

Mole de Gente

TEMOR

Lo más leido

Verified by MonsterInsights