Cartas a la redacción:
Militantes y simpatizantes de Morena en Veracruz alzan la voz con un posicionamiento público en el que exigen la renuncia inmediata de Esteban Ramírez Zepeta como dirigente estatal de Morena, señalándolo de haber operado en contra de los principios fundacionales del movimiento.
El documento, dirigido directamente a la gobernadora electa Rocío Nahle, a quien reconocen como la primera morenista del estado, denuncia una gestión marcada por la imposición de candidaturas, prácticas corruptas y un abierto desprecio por las bases del partido.
“La elección del 2 de junio no sólo mostró retrocesos electorales en varias regiones del estado, sino que evidenció las consecuencias de una dirigencia alejada del pueblo, de espaldas al territorio, y entregada a intereses ajenos a la transformación”, señala el comunicado firmado por decenas de militantes.
Entre las acusaciones se incluyen la venta de candidaturas, selección de perfiles sin respaldo social, y manejos financieros oscuros que, aseguran, rompieron la confianza de la militancia y de la ciudadanía.
El llamado no es menor: exige no solo la renuncia de Ramírez Zepeta, sino una profunda reestructuración de Morena en Veracruz. “Es tiempo de limpiar la casa y devolverle al partido su rumbo original: democracia, transparencia y lealtad al pueblo”, afirman los firmantes.
El llamado a Rocío Nahle es directo: “Vire el timón hacia la esencia de nuestro partido”, le piden, instándola a no ignorar el clamor de quienes sostienen el movimiento desde abajo. La militancia exige congruencia. Exige justicia interna. Exige que Morena vuelva a ser del pueblo, y no de una cúpula cerrada y convenenciera.
