*¿Contra quienes iban los “sicarios” en Oluta?
*“Sherlock” García ya los tiene identificados
YA NO se sabe si se trata de un holograma –técnica que consiste en crear imágenes tridimensionales que parecen reales-, de videos hechos exprofeso para cada ocasión, o de una necedad asumiendo que con el mismo disco rayado gana credibilidad, cuando es todo lo contrario, pero el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez volvió a salir con el mismo estribillo tras el atentado contra la Fiscal de Distrito de Acayucan. Marisela Rojas Cisneros (¿será parienta de Eric Cisneros?), de la diputada local por Morena, Florencia Martínez Rivera, y de un regidor de Acayucan en el vecino municipio de Oluta, concretamente al interior del restaurante El Delirio, en horas de trabajo de la funcionaria de justicia y del edil-, cuando un comando de tres sujetos armados intentaron ¿asesinarlas?, pero fueron repelidos por un ministerial que cuida las espaldas de Marisela, aunque queda la duda a quien pretendían ultimar, ya que eran tres servidores públicos los allí reunidos (y esa es, acaso la incógnita, aunque se sabe que la Fiscal ya había recibido amenazas y por ello traía seguridad). Como fuera, el Gobernador –que no la Fiscal General del Estado, como debería corresponder-, salió a decir a los pocos minutos del hecho que ya tenían identificados a los fallidos agresores, y no solo eso, insistió en la misma cantaleta de siempre: “Se va a investigar a fondo para dar con los responsables por los delitos que resulten como se ha hecho en todos los casos (¿?). Hay ya indicios que fortalecen una sola línea de investigación, y las personas involucradas en el intento y otros cómplices están identificados”, por lo que insistimos: el Presidente Andrés Manuel López Obrador no debería desperdiciar el talento de este émulo (imitador de alguien, aclaramos, no vaya a pensar el mandatario que esa palabra es una grosería) de Sherlock Holmes, y llevárselo como titular de la Fiscalía General de la República para que aclare todo lo pendiente, incluido donde se encuentran los 43 estudiantes de Ayotzinapa, quien descubrió América y que fue primero, el huevo o la gallina. También aclaramos –para evitar malos entendidos- que Sherlock Holmes es un detective de ficción creado en 1887 por el escritor británico Sir Arthur Conan Doyle. Se trata de un personaje inglés de finales del siglo XIX que destaca por su inteligencia, su hábil uso de la observación y el razonamiento deductivo para resolver casos difíciles.
Y ES que resulta sorprendente que en cosa de horas, el mandatario diga que están plenamente identificadas las tres personas que atacaron a balazos a la Fiscal, Diputada y al regidor de Acayucan que en horas laborales convivían alegremente en un restaurante, hechos en los cuales todos resultaron ilesos pese a que se dispararon armas de fuego. Ahora que, si ya los tienen identificados es porque saben quiénes son los perpetradores del atentado pero, curiosamente andaban sueltos en las calles, y eso agrava los hechos ya que, por lo demás, alguien del restaurante, cliente o empleados pudieron dar aviso a los delincuentes que ahí se encontraban los personajes, lo que indica que no se trató de un evento aislado, por el contrario, fue perfectamente planeado, aunque la incógnita, insistimos, es saber por quién iban los maleantes y porque. También llama la atención que el ministerial desenfundara tan rápido al ver entrar a un sujeto por una de las puertas blandiendo un arma y de inmediato accionara la suya para repeler la agresión, y que los acompañantes del malhechor –dos más con armas largas según se observa en los videos- hayan salido corriendo, espantados, cuando ese tipo de sicarios van decididos a todo, por lo regular drogados. No deseamos ser mal pensados, pero todo parecería ser un montaje de película, en donde un solitario y valiente policía con una sola escuadra dispara y ahuyenta a tres matones y los hace correr despavoridos a pesar de que estos traen metralletas –como se observa en los filmes-. En fin, algo está muy raro caracho, como dijera Gil Gámez, y si de verdad el Gobernador tiene datos firmes, debería exhibirlos ya que su credibilidad, de por sí lesionada por tanto estribillo, corre el riesgo de desplomarse aún más, aunque una raya más al tigre que importa.
LO QUE llama la atención es que el Gobernador, en franca violación a la autonomía de la Fiscalía General del Estado (o al menos eso queremos pensar), tenga a la titular de la dependencia, Verónica Hernández Giadans como un florerito a su lado derecho, mientras en el otro extremo, a su izquierda a la maceta, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, mientras él, y solo él da declaraciones acallando lo que corresponde a la responsable de procurar justicia. El cuadro hace ver un autoritarismo a ultranza por parte del mandatario que no lo ejerce ni el Presidente Andrés Manuel López Obrador que, con todo y su absolutismo da espacio al Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, cuidando al menos las formas, sabedor del dicho de don Jesús Reyes Heroles de que la forma es fondo, aunque el oficio político no es, precisamente, lo de Cuitláhuac.
SIN DUDA, habría que recordarle al Gobernador que en México, al menos en las constituciones –la general de la República y la del Estado-, las fiscalías deben ser autónomas y no dependientes del ejecutivo o de cualquier otro poder, pues a lo largo de los años se observó que en casos que implicaban graves violaciones a los derechos humanos era –y es- común ver que las investigaciones penales tienden a ser manipuladas por el poder político para determinar el rumbo de la investigación. Y cuando las instituciones de procuración de justicia deben investigar a agentes del propio
Estado (caso Félix Salgado Macedonio que a pesar de 5 denuncias por violación es ratificado por MoReNa como candidato al Gobierno de Guerrero), resulta aún más complejo. En delitos tan graves como la tortura y la desaparición forzada puede observarse la magnitud de la dificultad para alcanzar resultados.
EXISTE TAMBIÉN la desconfianza generalizada de la ciudadanía de que las investigaciones contra ex servidores públicos que ocupa altos cargos de responsabilidad, no lograrán ser investigadas, procesadas ni sancionadas correctamente, por el posible vínculo de estos con quienes los deben investigar, que a su vez dependen del Ejecutivo. Y el caso de Oluta es más que contundente: ¿contra quién iban los delincuentes del “fallido” atentado en el restaurante El Delirio y porque motivos?, eso es algo que tal vez nunca se sepa, y acaso sean detenidos chivos expiatorios que den su propia versión. Y es que no es de dudarse que los matones que fallaron, si es que fallaron, podrían ser ejecutados por los propios autores intelectuales en aras de no dejar rastro ni que se inculpe a nadie. En fin, nuestro moderno Sherlock Holmes tendrá, seguramente, la respuesta adecuada en su momento, aunque no deje de ser quimera. OPINA carjesus30@hotmail.com