Desde el momento en que en México hay inversión extranjera récord, la oposición se queda sin argumentos, porque quiere decir que confían en el liderazgo de la Presidenta, en las leyes, en la justicia, en la estabilidad económica, en la solidez del peso, en el control a la inflación, situaciones de las que no cualquier país del mundo puede presumir, empezando por el vecino del norte.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció una cifra histórica de inversión extranjera directa en el segundo trimestre de 2025: 34,265 millones de dólares, un monto que supera los 31,096 millones registrados en el mismo periodo de 2024, cuando ya se había alcanzado un récord, y que duplica lo captado en 2017. Esto a pesar de la guerra arancelaria que crea incertidumbre en el mundo, pero que también muestra la indefinición e improvisación de un presidente de Estados Unidos, que habla sin sustento y se arrepiente de lo dicho días antes.
Donald Trump quiso crear incertidumbre y lo que logró fue que se perdiera credibilidad no sólo él sino el gobierno de su país, de ahí que haya más empresas estadounidenses que ven mayor certeza y menor riesgo invirtiendo en México que en el vecino país.
Empresas como México Pacífic, de Estados Unidos, de energía, gas natural y licuado, invirtió en nuestro país 15 mil millones de dólares. La australiana Woodside Energy, con una inversión de 10 mil 400 millones de dólares, Amazon, del vecino país, invirtió 6 mil millones; la turística Royal Caribbean Group, de Estados Unidos, mil 500 millones de dólares, entre otros capitalistas extranjeros.
Empresas como Woodside Energy y México Pacific lideran megaproyectos de gas natural.
Los principales países inversionistas son Estados Unidos, España y Canadá, las regiones más beneficiadas son CDMX, Nuevo León, Estado de México, Baja California y Querétaro.
De estas cinco entidades dos de ellas están en manos de la oposición, de tal suerte que nadie puede decir que desde el gobierno federal sólo se promueven los estados gobernados por el partido en el poder; sin embargo, hay casos en los que gobiernos de oposición se adjudican las inversiones del centro como si fuesen de la entidad, confundiendo a la población y tratando de crear una imagen falsa de sus gobiernos, como es el caso de Samuel García, gobernador de Nuevo León, quien, toda inversión de la federación dice ser propia del estado.
Sin embargo, el gobierno de Samuel García fue cuestionado en el Congreso local, por incrementar 7.6 por ciento la deuda pública a corto y largo plazo, y desde las bancadas de la oposición solicitaron al gobernador que reduzca la deuda en obras o proyectos innecesarios, como la imagen del gobernador y su esposa.
Llama la atención que anteriormente se promovía en el mundo entero el turismo de Estados Unidos para acercarse divisas, ahora está suspendido en el tiempo, tanto que Las Vegas está a punto de la quiebra, hoteles y líneas aéreas ofrecen descuentos en promedio del 60 por ciento para atraer turismo.
El caso de Las Vegas es preocupante para todos, ya que, en la zona metropolitana de esta ciudad de Nevada, que recibía 40 millones de visitantes al año, trabajan un promedio de 80 mil mexicanos, empleados principalmente en el turismo, hoteles, casinos, restaurantes, albañilería, electricidad, carpintería, intérpretes, etc. El 28% de la población de Las Vegas es hispana, y los mexicanos representan el grupo más numeroso.
Ahora, no sólo los casinos están vacíos sino las calles también.
La inversión extranjera que llega a México tiene que ver con el impulso de sus polos de atracción turística, como hoteles, cadenas de supermercados, y restaurantes.
En los regímenes anteriores los bajos salarios que se pagaban en México eran el pretexto de las autoridades para mantener los niveles de atracción para la inversión extranjera; ahora los inversionistas extranjeros consideran que los bajos salarios sólo producen descontentos y amenazas de huelga, mientras que empleados mejor pagados, asumen la responsabilidad de sentirse parte de la empresa.
Ante esta situación, no les asusta el anuncio dado a conocer por la Presidenta de México de un incremento al salario mínimo entre el 11 y el 12 por ciento para enero de 2026. Al contrario, saben que hay certeza jurídica y los derechos de empresarios y trabajadores están sólidamente establecidos.
La Presidenta hizo referencia al “mito del oscurantismo neoliberal”, que establecía que “si aumentaban los salarios iba a haber inflación; que, si aumentaba el salario mínimo, si los trabajadores ganaban más, no iba a haber inversión, porque lo que México podía ofrecer al mundo era mano de obra barata”.
Independientemente de las empresas que encuentran atractiva la inversión en México, se presenta un proyecto llamado de potencial verde, en estados como Oaxaca y Yucatán, con avances en energía eólica y solar; así como Jalisco y Michoacán, en cuanto a la agroindustria con enfoque sostenible.
Ante esta situación le queda a la oposición pocos argumentos para seguir criticando la gestión de la Presidenta Claudia Sheinbaum y ahora cuestionan el hecho que de cada 100 dólares producidos por las empresas extranjeras sólo dejan en México 9 dólares. Como si este tipo de ganancias fuera responsabilidad del gobierno mexicano, cuando es producto del sistema capitalista que la derecha tanto defiende.
La necesidad de encontrar defectos hasta en las virtudes, ha hecho de la oposición un rumor total, de tal manera que cuando denuncian algo que es verdad nadie les cree y los equilibrios se pierden hasta en los medios, que tienen ya muy definida su filiación política.
PEGA Y CORRE.- Luis Carlos Ugalde, ex consejero presidente del IFE, forma parte de los mexicanos que descalifican la política electoral de México y creen que debilitando al INE, podrían tener mayor oportunidad de triunfo los partidos de derecha que protege y de los que forma parte. A propósito de una conferencia que ofreció en Harvard, la Presidenta de México señaló que los presidentes de partidos políticos “o aquellos que fueron del INE se sienten dueños de la palabra democracia, cuando fueron causantes de los fraudes electorales”… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.