ACONTRACORRIENTE
Manuel del Ángel Rocha
José Antonio Meade Kuribreña, es el representante natural del gobierno para las agencias calificadoras, pero sobre todo para los especuladores de las casas de bolsa, los hombres de negocios, tanto de México, como de Estados Unidos, y de los organismos financieros, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, que les inspira mucha confianza su regreso a la Secretaria de Hacienda. Licenciado en Economía por el ITAM, la mayor parte de su carrera administrativa la ha hecho precisamente en la SHCP, en los rubros del ahorro bancario, ahorro para el retiro, en la Financiera Rural y el BABRURAL, la subsecretaría de Ingresos, la Secretaria de Energía, y Hacienda, donde terminó hasta el último día con Felipe Calderón. Casi todos los puestos durante los sexenios de Vicente Fox y Calderón, y precisamente de Hacienda, ha recomendación de Luis Videgaray, Peña Nieto lo nombró Secretario de Relaciones Exteriores, desde el primer día de su mandato.
En agosto del año pasado, el presidente lo designó Secretario de Desarrollo Social en sustitución de Rosario Robles, puesto que abandonó la semana pasada para regresar a Hacienda, y entregar a la Cámara de Diputados el Presupuesto de Egresos de 2017, cuya elaboración corresponde a Videgaray, compañeros de licenciatura durante su estancia en el Instituto Tecnológico Autónomo de México. El presupuesto para el año venidero, presenta un ajuste de casi 240 mil millones de pesos, básicamente en salud, educación, el campo, e infraestructura. La reducción se debe al incremento del precio del dólar, y la caída del precio de petróleo, pero pueden haber más recortes que auguran protestas sociales, que vendrán de los sectores más afectados, ligados al campo, la obra pública y educación. Porque de la estructura de gobierno de los niveles de coordinadores y directores generales, subsecretarios, secretarios, directores de organismos descentralizados, subdirectores generales, los sueldos, sobresueldos, compensaciones, bonos especiales, primas bimestrales, viáticos, gasolina, van al presupuesto de la alta burocracia, de la que hasta ahora, José Antonio Meade, no ha dicho si abra algún reajuste.
Un rubro que a los especialistas les pareció halagüeño, es en el superávit primario que de 0.2 planeado para este año, lo programaron al 0.4%, cuyo objetivo es limitar el crecimiento de la deuda. En este rubro los organismos financieros internacionales, no perdonan demoras en los pagos. En la renegociación de la deuda, debe haber un interlocutor confiable, que no le provoque insomnio a los acreedores, porque entonces vienen las presiones extras, como el incremento al monto de los intereses, lo que hace impagable cualquier deuda. Argentina y Grecia, son los ejemplos de la agresión del “coyotaje” financiero. Este es el neocolonialismo que han denunciado de manera reiterada los países de izquierda del Cono Sur. En México no hay espacio para que se deje de cumplir con alguno de estos compromisos, por ello el regreso de Meade Kuribreña, para “quedar bien” con los agiotistas. Los “Fondos Buitre”, que tanto Samuel, como Cristina Kichtner denunciaron, y no pagaron en su totalidad a los prestamistas, representaron enormes sangrías a la economía, afectando principalmente al pueblo, al impactar la inversión social en educación, salud y empleo.
Por ello, ante el crecimiento sostenido de MORENA, y Andrés Manuel López Obrador como candidato a la presidencia para 2018, el regreso de José Antonio Meade al manejo de las finanzas nacionales, es una vinculación natural con el mundo financiero mundial, que lo ponen también en la cresta de la opinión pública como un candidato por encarte, después de que Peña Nieto lo paseó por valles y serranías del país en la SEDESOL. El baño de pueblo hace que los hombres del billete verde y nacional, le empiecen a apostar, porque dentro del gabinete el único mejor posicionado es el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que sería candidato del PRI, y aquí la pregunta es saber porque partido iría Meade Kuribreña; por el PAN, por el PRIAN, independiente, o por el Verde. Es un candidato hibrido. El candidato lógico de los intereses económicos nacionales y trasnacionales, que dejó de ser el caballo negro del sistema, para entrar en abierto a la carrera presidencial por el PRI-PAN, toda vez que la neoliberal política económica aplicada por ambos partidos siendo gobierno, es indistinta, y donde al único enemigo que tienen en común, lo identifican como un “peligro para México”: AMLO. Más claro ni el agua, Meade Kuribreña fue Secretario de Hacienda con Felipe Calderón del PAN, ahora lo es en la misma Secretaría, con Enrique Peña del PRI. Para ganarle a Andrés Manuel, ¿será el candidato de los dos partidos?.