En memoria de Héctor Gilberto Lozano Aburto, 1964-2024. Participante de la primera JMJ en 1985
La **Jornada Mundial de la Juventud (JMJ)**, iniciativa católica global impulsada por San Juan Pablo II (1920-2005), en 1985 —hace exactamente 40 años—, se inspiró en los festivales juveniles de Europa del Este. Tras la última edición en Lisboa (agosto de 2023), donde el Papa Francisco (1936-2025) congregó a más de un millón y medio de jóvenes que financiaron sus viajes con esfuerzo personal y apoyo familiar, la Iglesia se prepara ahora para un evento excepcional: el **Encuentro Mundial de Jóvenes con motivo del Jubileo 2025**, presidido por el recién electo Su Santidad León XIV. A lo largo de su ministerio sacerdotal, el Padre Provost siempre ha estado muy involucrado en la pastoral juvenil en sus diversos servicios en la Iglesia.
Este acontecimiento, programado del 28 de julio al 3 de agosto de 2025 en Roma, reunirá a más de un millón de peregrinos de todo el mundo. Será la primera vez que el Vicario de Cristo —a solo dos meses de asumir el pontificado— dialogue con la juventud católica global. Desde la provincia eclesiástica de Veracruz, cerca de **1,000 jóvenes** de sus ocho diócesis viajarán esta semana a la Ciudad Eterna. Su objetivo: encontrarse con el Santo Padre, cruzar la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro y obtener la indulgencia jubilar. En los últimos meses, en diversas parroquias, hemos visto cómo los jóvenes trabajaron arduamente para reunir el dinero y pagar su peregrinación al Jubileo de la Juventud en el marco del Año Santo, el primer cuarto del siglo XXI, que pasa rápidamente.
**Contexto histórico y espiritual**
El Jubileo 2025 fue convocado por el Papa Francisco mediante la bula *”Spes non confundit”* (9 de mayo de 2024), celebrando así el primer cuarto del siglo XXI. Tras la apertura de la Puerta Santa en Navidad de 2024, este Año Santo invita a los fieles —como en milenios anteriores— a renovar la esperanza frente a los temores del fin de los tiempos.
La esencia de la JMJ
Desde su origen, la JMJ ha sido un **hito de fe y comunidad**:
– Los jóvenes **financian su participación** mediante años de trabajo en parroquias (rifas, ventas, ahorro). Por meses y semanas, trabajan arduamente.
– Combina **conferencias, celebraciones eucarísticas** y testimonios de vida.
– Destaca por el **orden y la devoción** de los asistentes, como se vio en Toronto (2002), donde las autoridades admiran la ausencia de incidentes pese a la multitud.
**Testimonio personal**
Como participante en ediciones como Roma, Santiago de Compostela, Toronto y París, Loreto atestigua el **impacto transformador** de estos encuentros. La imagen de Francisco compartiendo el mate con una joven argentina en Lisboa sintetiza la **cercanía papal** que conmueve al mundo. Hoy, a mis 59 años, veo con alegría cómo los peregrinos veracruzanos —250 en Lisboa, próximos a 1,000 en Roma— regresan con vocaciones renovadas o la decisión de servir en matrimonios, seminarios y conventos.
Antes de iniciar la peregrinación, los jóvenes tuvieron una preparación espiritual para iniciar su viaje por casi 15 dias. En concreto, los chicos de las Comunidades del Camino Neocatecumenal participaron en celebraciones penitenciales, como la bendición de sus respectivos sacerdotes. Personalmente, las Jornadas Mundiales marcaron mi vida; la última en la que participé fue en Toronto, y también fue la última que presidió San Juan Pablo II.
El 31 de marzo de 1985, en la 1ª Jornada Mundial de la Juventud, en Roma, el Vicario de Cristo afirmó: La juventud de cada uno de vosotros, queridos amigos, es una riqueza que se manifiesta precisamente en estas preguntas. El hombre se las plantea a lo largo de toda su vida. Sin embargo, durante la juventud, ellas se imponen de un modo particularmente intenso, incluso insistente. Y es bueno que suceda así. Porque esas preguntas prueban la dinámica del desarrollo de la personalidad humana, propia de vuestra edad.”
El 20 de agosto de 2005, en la Jornada Mundial de la Juventud en Alemania, SS Benedicto XVI (1927-2022) expresó: “Queridos amigos, permitidme añadir sólo dos breves ideas. Muchos hablan de Dios; en el nombre de Dios, se predica también el odio y se practica la violencia. Por tanto, es importante descubrir el verdadero rostro de Dios. Los Magos de Oriente lo encontraron cuando se postraron ante el niño de Belén. ‘Quien me ha visto a mí, ha visto al Padre’, dijo Jesús a Felipe (Jn 14, 9). En Jesucristo, que permitió que su corazón fuera traspasado por nosotros, se ha manifestado el verdadero rostro de Dios.”*
En el verano de 2013, SS Francisco, en la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Brasil, dijo: “Queridos amigos, no se olviden: ustedes son el campo de la fe. Ustedes son los atletas de Cristo. Ustedes son los constructores de una Iglesia más hermosa y de un mundo mejor. Levantemos nuestros ojos hacia la Virgen. Ella nos ayuda a seguir a Jesús, nos da ejemplo con su ‘sí’ a Dios: ‘Aquí está la esclava del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho’.”
La Jornada Mundial en Brasil fue muy significativa para la arquidiócesis de Xalapa, ya que una joven peregrina, María del Ángel Soto Zárate, sufrió una injusticia: le cambiaron en el aeropuerto su maleta por una con drogas, y estuvo detenida. Aquí en Xalapa nos movilizamos en defensa de su inocencia.
**Hacia Corea 2027**
Tras el Jubileo romano, la JMJ continuará su misión en **Corea del Sur (2027)**, primera sede asiática. Un nuevo capítulo para esta peregrinación, que, cuatro décadas después, sigue demostrando que **la esperanza no defrauda**.
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