Dentro de las noticias alentadoras que se nos han proporcionado en esta semana para este año, destacan el pronóstico en la mejora del crecimiento de México y la vacunación masiva de la población de México y de muchos otros países del mundo; con respecto a la noticia primera, tenemos el pronóstico del Fondo Monetario Internacional (FMI), que nos indica que la economía mexicana tendrá un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 4.3%, que será producto del jalón que tendrá nuestra economía debido al incremento de las exportaciones principalmente hacia los Estados Unidos de América, que dicho sea de paso es muy cercano al pronóstico de 4.6%, que ya había elaborado la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en el Presupuesto Federal para 2021. En octubre de 2020, el FMI estimaba un crecimiento del PIB de nuestro país, del 3,5%.
En relación a las vacunas contra la pandemia de Covid-19, las que han sido desarrolladas por laboratorios de gran prestigio a nivel internacional, aparte de los problemas de producción y logística de transporte para hacerlas llegar a diferentes partes del mundo, en nuestro país su adquisición, son en parte respuesta a la presión y la solidaridad, que comienzan a aparecer por el miedo y el dolor que emergen por el número de contagiados y fallecidos de la población mexicana, producto del relato o experiencias que hacen, los que ya han padecido o estado cerca de este mal, que ya se comenzó a propagar de manera exponencial.
Con respecto a esta pandemia, es imposible no recordar la novela “La Peste”, de Albert Camus, publicada en 1947, donde posiblemente fue la ciudad argelina de Orán que ya había sido asolada por varias epidemias de diversas pestes (tal vez bubónica, neumónica y/o septicémica), que le sirvió de inspiración para escribirla; resulta relevante o de interés general, el sentido que se da en esta novela a la existencia de los seres humanos, cuando aflora su sentido de solidaridad, aunque se carezca de creencias religiosas o de posturas éticas definidas. El autor en última instancia sostiene que los hombres no tienen control sobre nada.
Aunque el sentido extremo de cuestionar la existencia racional de los hombres, suponga una postura filosófica, en el caso de México y el mundo, lo que debe prevalecer son los hechos comprobables con las opciones que tenemos, donde el proceso de vacunación no debe atender a posturas extremas, sino al conocimiento científico y médico. Los informes del Subsecretario de Salud, Dr. Hugo López-Gatell, no parecen convencer a nadie.
En este sentido, es necesario sostener que los recursos aplicados a la población en forma de vacunas, deben responder al mandato constitucional de cada funcionario público, que es el de procurar el bienestar y la protección de su población y que, en última instancia, es a la que se deben. Sin embargo, el contagio del Presidente de México, Licenciado Andrés Manuel López Obrador, del que esperamos su pronta y satisfactoria recuperación, deja muchas interrogantes que tendrán que ser satisfechas.
Por otra parte, será relevante entender que además de que deba conocerse con toda transparencia, como se aplican los recursos presupuestados, también es menester conocer los criterios utilizados para realizar las compras, los laboratorios y vacunas contratados con los plazos de entrega, los costos y pagos realizados, la manera como se decidieron las compras, su distribución y a quienes y donde, se aplicarán con sus tiempos de entrega. Todo ello, con el afán de aclarar las dudas en el uso de los recursos públicos, al aplicarse las vacunas.
Lo principal será respetar y ser solidarios del dolor que embarga, a todos aquellos que han sufrido las secuelas de esta pandemia; asimismo, estar preparados para que, en la medida de lo posible tomemos providencias en el futuro, para que se puedan mitigar los efectos desde antes que se desencadenen las pandemias que, de acuerdo con los expertos, se nos afirma que pueden llegar a ser recurrentes. Para ello, es necesario que se dediquen más recursos a la investigación, la innovación y el desarrollo científicos, aplicados a la prevención de la salud de los mexicanos, además de un cuidadoso y transparente uso de los recursos públicos hasta ahora empleados.
Retomando el hilo inicial de esta nota, ahora que para algunos se espera una recuperación de la economía mayor a lo anticipado, de acuerdo a los pronósticos y bajo el supuesto que se podrán solventar todos los óbices en la aplicación de las vacunas, lo que se requerirá es poder alcanzar de nueva cuenta, un retorno al crecimiento económico sostenido, de ahora en adelante; no obstante, para numerosos expertos, es muy poco probable que ello sea factible, salvo en el sector externo de México.
Por último, aprovecho la oportunidad para externarle mi más sincero beneplácito y respetos a la Maestra Claudia Guerrero Martínez, por haber superado satisfactoriamente, las atrocidades de la inefable enfermedad pandémica que nos ha aquejado a todos por igual.
Comentarios: linopereaf@yahoo.com (*) Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.