Sin duda, la fecha del 12 de diciembre de cada año es especial para los mexicanos, pues es el día en que se demuestra la devoción hacia la Santa Virgen María de Guadalupe. Fecha en que se calcula fue la última aparición de ésta en 1531, en el Cerro del Tepeyac. El culto a la Virgen de Guadalupe entonces se remonta a la primera época de colonización española.
De acuerdo con San Bernardino de Sahagún en sus escritos, fue en 1531 cuando se dan las apariciones frente al indígena Juan Diego, en plena etapa de depresión pues apenas 10 años antes el ejército de Cuauhtémoc había sido derrotado por los españoles.
Es la etapa en que los indígenas eran inclinados en su fe hacia la religión católica, que surgía de la evangelización y en un inicio adoptaron la imagen de María,asumiendo que era la Diosa Tonantzin que junto a Ometéotl formaban la pareja de dioses primigenios del panteón Mexica, mismos que veneraban en el Tepeyac. Sin embargo, tras los milagros del Tepeyac que se le atribuían a la Virgen, tales como curar enfermos, acabar con la peste de 1544, y salvar vidas en accidentes, pero, sobre todo, el que su imagen se semejara a su condición indígena, hizo que la Virgen fuera reconocida, venerada y adorada, principalmente por éstos.
Y desde esa época hasta la fecha, la Virgen Guadalupana es parte de la esencia de nuestra raza y los mexicanos nos asumimos Guadalupanos, aunque algunos no sean necesariamente católicos. Y por ello su imagen y su influencia Santa, es venerada y reconocida por sus bondades y su presencia hace sentir a muchos, que son sus hijos y, por lo tanto, sentir que no están solos, especialmente en los momentos de dolor o de dificultad.
De ahí que, esté presente su imagen en los principales altares de Iglesias y Basílicas no solo de México, sino de todo el mundo. Y menciono solo algunas: la Basílica de San Pedro, Roma; la Catedral de Nótre Dame en Paris, Francia; la Catedral de San Patricio en Nueva York; la Iglesia de la Esperanza Macarena en Sevilla España, La Iglesia de Santa María en Tokio, Japón, entre muchas otras.
Pero el amor hacia ella es de los mexicanos, sin duda. Sea en camiones, bicicletas, caminando largos kilómetros millones de connacionales recorren kilómetros cada 12 de diciembre de cada año, a la Basílica de Guadalupe y en los estados y municipios del país, hacia las iglesias, catedrales o templos dedicados a ella, para orar y dar gracias.
Pero sumado a la devoción y la fe que muchos mexicanos le deben a María de Guadalupe, desde hace 490 años, en ella se reconoce a los más divinos símbolos de identidad en México. Como dijera Bernardo Barranco, vicepresidente del Centro de las Religiones de México a la BBC Mundo: “La Virgen de Guadalupe refleja de manera profunda lo que es la religiosidad popular del pueblo mexicano”.
Sus milagros han sido muchos en México y en el mundo, pero hay uno que se nos ha compartido recientemente y es lo que con amor asume Armando Arcos, músico y fundador de “Los Joao”.
Como lo han publicitado los medios, Armando padeció un cáncer diagnosticado en el 2020 y se encomendó a la Guadalupana con mucha fe, y como él lo menciona: “fueron 33 días de estar hospitalizado, rezando y confiando en la mano de Dios, del Señor Jesús, primero que nada y de la intercesión de mi Virgen María de Guadalupe” . Recibió la unción y después de tratamientos se realizó unos estudios observándose meses después que su diagnóstico demostraba que estaba limpio. Por ello él le compuso una canción y la interpretó como gratitud ante su imagen, el pasado 11 de diciembre en su templo. Hoy sus amigos, invitan a promover ese milagro y me sumo a ello.
Y como él miles de mexicanos, con o sin recibir un milagro, sienten en la Guadalupana a su aliada permanente para los momentos difíciles o de dolor.
Porque independientemente de que existan personas que pueden negar que existan milagros o cambios en la vida de las personas ligadas a la fe, la realidad es que tras un sentimiento de amor y devoción hacia Dios, la Virgen, los santos, o cualquiera que sea el ser superior al que se encomienden, que culmine en un cambio positivo en los seres humanos en su salud, en situaciones complicadas de dolor, económicas, de desequilibrios familiares, emocionales, mentales, etc., estará siempre algo divino o maravilloso que mueve montañas. Y para los Guadalupanos, es su Virgen amorosa.
Por eso en este día 12 de diciembre, bienvenidos todos los fieles que le vienen a demostrar su amor y devoción. Y como yo soy muy Mariana, encomiendo a ella mi familia, mis amigos y amigas, mi comunidad y mi país. Que sea por siempre amada y bendita.
Gracias y hasta la próxima.
MARÍA DE GUADALUPE
