*Más de 29 mil menores viven en orfanatos o albergues
*Alito Moreno y Fofo Arana, una desgracia para el PRI
LA DIRECTORA del Centro Estatal contra las Adicciones Cúspide, Karina Alor Aguilar ha puesto el dedo en la llaga de una sociedad que debería sentir malestar por lo que está ocurriendo en el Estado, porque involucra a niños que, se supone, son el futuro de la Nación. Y es que en distintas regiones de la Entidad –y del País- se está viviendo una situación de alarma, ya que menores, en algunos casos desde los 10 años comienzan a tener contacto con las adicciones, esto es, con el consumo de alcohol y algunas drogas como la mariguana y el cristal, y de ello hay pruebas contundentes. Según Karina Alor, al Centro Estatal contra las Adicciones Cúspide llegan adolescentes de 15 años con problemas de adicción al cristal, que requieren una atención integral para recuperarse. Hasta 2023 y 2024, las drogas de primer contacto para adolescentes eran el alcohol y la marihuana, pero en el último año comenzaron a atender niños y niñas que habían iniciado consumo de cristal. De esa manera, la droga de mayor impacto por su consumo es el cristal en primer lugar, posteriormente el alcohol y después la marihuana. La versión es corroborada por el representante de la Comisión Estatal Contra las Adicciones, Carlos José Sáenz Álvarez que asume que el consumo de cristal en menores de edad por primera vez, es posible por el bajo costo en el mercado ilegal y es compartida por amigos, por lo que hace un llamado a la sociedad en general ya que las adicciones es una responsabilidad de todos, no solo de los padres. También el exdelegado del Área Veracruz 2 con sede en Xalapa de Alcohólicos Anónimos, Rolando Tiburcio Hernández, cita que la edad de inicio de consumo de alcohol se redujo, y ya se han detectado algunos menores de ocho años que son consumidores de bebidas embriagantes, versión que asiente Matilde Gamundi García, Coordinadora del Centro Comunitario para la Salud Mental y las Adicciones (Cecosama). En ese sentido refiere que los problemas de salud mental aumentaron desde el impacto de la pandemia del Covid19, y eso también favoreció para el incremento de adicciones, tanto en menores de edad como en mujeres. Como fuera, el alcohol, junto con sustancias como la marihuana y el cristal son de las que más crean adicción en jóvenes; el alcoholismo no solo afecta a los individuos, sino que también puede desencadenar hasta 62 padecimientos potenciales, incluyendo cáncer, hipertensión, depresión y ansiedad. Esos problemas no solo impactan la salud del consumidor, sino que también alteran su entorno social y familiar creando un ciclo de daño que puede ser difícil de romper. Y solo para orientar, algunas de alertas de posibles consumidores de cristal son: Cambios conductuales, del estado de ánimo y en los intereses habituales. Incumplimiento de responsabilidades en casa, escuela y trabajo. Alteraciones del sueño. Movimientos corporales excesivos e hiperactividad. Aparente comezón corporal. Pérdida de apetito y de peso corporal. Respiración agitada. Aumento de temperatura corporal. Marcas, llagas y heridas en la piel. Daños en la dentadura, hemorragias nasales, descuido de la higiene personal, conductas violentas, aislamiento social y alucinaciones.
ALGUNOS EFECTOS, directos o indirectos provocados por las adicciones, ya sea por consumo o efectos colaterales son la depresión que no respeta edad, condición social o sexo. En ese sentido, tras darse a conocer la muerte de una niña de 10 años originaria de Mariano Escobedo, el vocero de la Diócesis, Helkyn Enríquez Báez hizo un llamado a los padres de familia a estar muy pendientes de los hijos para percatarse de una situación de ese tipo. El religioso asume que la depresión existe y puede deberse a varios factores, pero no respeta edad ni condición ni sexo. Se trata de una enfermedad que cuando se torna aguda puede ocasionar crisis emocionales. Y es que, si bien las instituciones responsables de salud han ido avanzando en la prevención de auto atentados contra la vida, todavía hace falta mucho trabajo a nivel cultural.
PERO LOS niños de México, muchos de ellos, si bien no es la generalidad, no solo viven el problema de las adicciones: consumo de alcohol y drogas, sino que enfrentan otro fenómeno concatenado, en este caso, la orfandad debido a la violencia que asola al Estado y al País en su conjunto, y acaso por ello la diputada morenista, Alma Marina Vitela Rodríguez ya presentó una iniciativa para que la Fiscalía General de la República y las entidades federativas elaboren registros de menores en estado de orfandad por feminicidio o violencia debido a choques entre carteles o por los efectos de la delincuencia organizada o común. Una investigación realizada por la Universidad Iberoamericana, con sede en Puebla, da cuenta que en México hay 1 mil 53 niñas y niños huérfanos, porque sus madres fueron víctimas de feminicidio. Paralelamente, de acuerdo a cifras de Aldeas Infantiles SOS México, más de 29 mil niños, niñas y adolescentes viven en orfanatos o albergues en el País al no tener padres que se hagan cargos de ellos, ya sea porque fueron asesinados o desaparecidos o porque los abandonaron. Y es que, como bien se sabe, los orfanatos son instituciones que se encargan de cuidar a los niños huérfanos, abandonados o expósitos. También se les conoce como casas hogar, hospicios, casas cuna, entre otros. Ahora bien, la reforma a la fracción IX del artículo 47 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, establece que en el caso de fallecimiento por feminicidio, la Fiscalía General de la República deberá registrar las infancias huérfanas, mientras que la fracción XXIII del artículo 49 plantea que a las entidades federativas corresponde, en caso de feminicidio, elaborar un registro que contenga información de las niñas, niños y adolescentes en estado de orfandad por este delito. Ese registro se integrará a la estadística criminal y victimal para definir políticas en materia de restitución de derechos de los menores. De acuerdo con datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en la incidencia delictiva del fuero común del 1 de diciembre de 2018 al 31 de enero de 2024 se han registrado en México 4 mil 817 casos de feminicidios. Todos estos traen consigo problemáticas que el Estado debe atender, y por ello la iniciativa de la legisladora morenista enfocada a las infancias huérfanas, es decir aquellas niñas y niños que perdieron a sus madres a causa de la violencia feminicida, en un primer momento para saber quiénes y cuántos son y en un segundo momento para que sean debidamente atendidos por una política de bienestar a las infancias en el país. Se trata de que esos menores al crecer no terminen engrosando las filas delictivas, por el contrario, se conviertan en hombres y mujeres de bien.
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VINO ALEJANDRO Moreno Cárdenas a Xalapa y no le fue del todo bien por los reclamos que recibió. El iluso campechano predice el triunfo del PRI –que en mala hora dirige- en las elecciones municipales de Junio, aunque, en realidad, ni el PAN quiere acordar una alianza o coalición, no porque estén en contra del tricolor al cien por ciento, sino de Alito Moreno y del nefasto representante Estatal, Adolfo Ramírez Arana, mejor conocido como el “Fofo” cuyo apodo, de acuerdo a la Academia de la Lengua Española, significa:
Esponjoso, blando y de poca consistencia. Así el ex partidazo en manos de semejantes especímenes. OPINA carjesus30@hotmail.com
