Entre lo utópico y lo verdadero
Por Claudia Guerrero Martínez
08 de mayo de 2025
Pillo, ladrón y abusivo del poder, Esteban Ramírez Zepeta, debe rendir cuentas; urgente su salida de Morena
***El culpable de atropellar a José Luis Chipahua y operador del dirigente de Morena, Carlos Alberto Redondo Gómez, se entregó a agentes ministeriales y la familia de la víctima pide $10 millones de pesos como reparación del daño. ¿Cuánto vale una víctima?
El costo político por mantener a Esteban Ramírez Zepeta en su cargo como dirigente de Morena en Veracruz es altísimo. Sus escándalos lo acompañan, así como sus vicios y hambre por adjudicarse dinero electoral a sus arcas personales, dinamitando la credibilidad de este partido político y debilitándose ante la opinión pública. Y Morena lo salva, utilizando el hambre y la necesidad bajo un mecanismo de programas sociales con fines electorales. Lo interesante es que miles y miles de millones de pesos entregados en diferentes programas asistenciales y curioso, en comparación, el porcentaje de pobreza sigue elevándose. Y estos no han funcionado para erradicar la extrema pobreza. Entonces, no han dado resultados el apoyo y “regalo” como derecho constitucional, que da Morena a los más vulnerables y sólo se ha convertido en un paliativo. Y este partido en Veracruz se ha convertido en un chiste, una hoguera de vanidades, cuando su líder estatal es un cínico y utiliza las siglas para el control económico y como botín de guerra.
Esteban Ramírez Zepeta ya no oculta su vida personal. La misma es respetable, pero cuando su poder lo usa para incrustar a amigos personales y parejas de ocasión, sin experiencia y con mucha hambre de poder en cargos administrativos y en la toma de decisiones sin antecedentes en la función pública, esto provoca caos y un desastre en la operatividad gubernamental.
Además, morenistas han acusado a Ramírez Zepeta de ladrón y vende-candidaturas al mejor postor. Y a conveniencia, bajo un arreglo en obra pública, control de tesorerías y manipular a alcaldes secuestrados por un pillo integrante de un grupo incondicional de Cuitláhuac García Jiménez.
Si las y los inteligentes lectores piensan que Esteban Ramírez Zepeta es leal a la actual gobernadora Norma Rocío Nahle García, se equivocan. El dirigente de Morena está acordando derrotas en contra de su propio partido, para repartir el “pastel” a otros partidos políticos como es el Partido Verde Ecologista de México, bajo acuerdos con Carlos Marcelo Ruiz Sánchez y Javier Herrera Borunda. Y traicionaron a Rocío Nahle, a quien la limitaron a seis candidaturas y el resto, Luisa Alcalde y Andy López Beltrán las otorgaron bajo acuerdos económicos, siendo Esteban Ramírez Zepeta, el negociador.
Según fuentes confiables, el PVEM obtendrá muy pocos triunfos en la elección a presidentes municipales, ya que Morena no quiere que crezca este cuestionado partido, por el reclutamiento de impresentables, pillos, violadores sexuales, agresores, aviadores y muchos con nula reputación.
Por su parte, el PT va sólo en esta elección municipal y puede ganar municipios importantes, pero su pleito interno entre la familia integrada por mafiosos muestra que este partido político familiar sufre un canibalismo y una insana lucha por el poder.
Morena no tiene seguro el triunfo en Coatzacoalcos, Xalapa, Orizaba, ni Poza Rica, ya que sus candidatos no conectan y son desconocidos ante los votantes, fueron impuestos por Morena y la amistad o colusión con Rocío Nahle, ya que la gobernadora debía favores electorales.
Este lunes, en un evento en la zona de Uxpanapa, el convoy que trasladaba al dirigente de Morena en Veracruz, Esteban Ramírez Zepeta, durante su rápido trayecto y con velocidad inmoderada, una de las unidades atropelló a un vecino de la zona, falleciendo por las heridas. José Luis Chipahua Bernabé, de 31 años, fue embestido por una camioneta Suburban, propiedad de Carlos Alberto Redondo Gómez, operador muy cercano a Esteban Ramírez Zepeta y encargado de los temas electorales en el sur de Veracruz.
Ante el atropellamiento, fueron los policías estatales quienes quitaron las placas del vehículo involucrado y al hoy conocido como Carlos Alberto “N” lo dejaron sólo a su suerte, teniendo él la necesidad de buscar un teléfono, por la falta de señal, con el fin de pedir apoyo a un abogado y familiares, por haber atropellado a una persona. Y finalmente, Carlos Alberto “N” se entregó a las autoridades ministeriales y a continuación daremos información exclusiva sobre este tema.
- Carlos “N” fue literalmente abandonado por el convoy de Esteban Ramírez Zepeta y el culpable tuvo que buscar apoyo legal, siendo los mismos policías quienes impidieron un linchamiento.
- La camioneta Suburban es propiedad de Carlos Alberto Redondo Gómez y sin cargo en el organigrama de Morena, ni es funcionario estatal o municipal, estaba haciendo méritos con Esteba Ramírez Zepeta.
- Los familiares de la víctima José Luis Chipahua Bernabé exigen una indemnización por $10 millones de pesos y los beneficiados son los líderes de oposición quienes pretenden hacer escarnio mediático y electoral ante esta tragedia. Y piden el pago en una sola exhibición.
- Por parte del culpable, entregan un millón 300 mil pesos por pago de indemnización a los familiares, siendo en tres pagos y la familia de la víctima no acepta, mostrando aquí el negocio y preguntando a las y los inteligentes lectores: ¿Cuánto vale tu familiar fallecido?
- Esteban Ramírez Zepeta trata de deslindarse del caso, pero es el responsable de sus operadores y deberá rendir cuentas ante esta tragedia.
- Los habitantes de Uxpanapa están siendo manipulados a tal grado, que abogados y personas cercanas a Carlos Alberto “N” no los querían dejar salir del municipio y algunos amenazaban con lincharlos si no hay un acuerdo económico.
- Además de ser policías de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz, los que quitaron las placas, también movieron el cuerpo de la víctima, bajo el criterio de no ser aplastado por otros vehículos pesados y particulares, alterando el lugar de los hechos y les pueden fincar responsabilidad.
Un tema vergonzoso por parte de los familiares, quienes son manipulados por líderes opositores de Morena y por el otro, Carlos “N”, un operador de Esteban Ramírez Zepeta, quien siempre protege a sus amigos muy cercanos, ahora tendrá que enfrentar a la justicia y todo por el desastre impuesto en la operatividad de Morena en Veracruz, manejándose con soberbia, abuso de poder y valemadrismo. Con la muerte de esta víctima, pone en el banquillo de los acusados a este dirigente de Morena y provocar su rápida salida.
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