“El deber de una persona está allí donde es más útil.” – José Martí.
Que extraños y mezquinos intereses movieron a la pasada administración municipal de Córdoba a donar por sus pistolas la Aeropista de Córdoba, o Aeródromo Juan Antonio Perdomo Díaz, de propiedad del citado municipio.
Cabe recordar que la ex alcaldesa de Córdoba, Leticia López Landeros concedió vía Congreso del Estado la donación del referido predio que cuenta con una superficie total de 71 mil 903.32 metros cuadrados, con 10 hangares, una torre de control de seis metros de alto y una plataforma de aviación con helipuerto.
Fue este 7 de marzo que, en sesión extraordinaria, las diputadas y diputados aprobaron el dictamen de la Comisión Permanente de Hacienda Municipal, por el cual se determina dejar sin efectos el acuerdo aprobado por este Congreso el 29 de julio de 2021, mismo que fue publicado en la Gaceta Oficial del estado con número extraordinario 300.
Lo anterior a petición y gestión del Cabildo de Córdoba al considerar que no se cumplió con la finalidad establecida en el resolutivo y de esta manera el citado predio fuera reintegrado al patrimonio del municipio.
¿Quién tenía la intención de operar dicho aeródromo?, ¿Cuáles fueron las reales intenciones?, ¿Al no cumplirse con lo establecido debió devolverlo al municipio? Son tan solo algunas de las preguntas.
Lo cierto es que los buenos oficios del presidente de la Junta de Coordinación Política de la Sexagésima Sexta Legislatura, Juan Javier Gómez Cazarín permitieron devolver la propiedad del predio al municipio de Córdoba, beneficiando con ello a los municipios de la región.
Cabe recordar que la pasada administración municipal cordobesa se entregó a las órdenes e instrucciones del secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, de quien se dice hace negocio con todo lo que le atraviesan enfrente.
Así pues, ha sido promotor turístico, desde la puesta en operación de una barcaza que según daba recorridos por el Río Papaloapan, pero que nadie ha alquilado, hasta operador de pistas de hielo en diversos municipios con recursos extraídos a base de chantajes y extorsión entre los munícipes de las regiones aledañas.
Y sino que le pregunten al alcalde de Río Blanco, a quien se afirma le solicitó tres millones de pesos para la puesta en operación de la Pista de Patinaje en Ciudad Mendoza, y motivo por el cual, habría en el fondo sido detenido recientemente, con el argumento de fabricarle diversos delitos vía sus brazos ejecutores –la Secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado-.
Por lo pronto, el legislador oriundo de Hueyapan de Ocampo, Juan Javier Gómez Cazarín, fue uno de los impulsores de dicha iniciativa junto con el Alcalde de Córdoba, Juan Martínez Flores, así como con la Síndica Municipal, Vania López González.
Con dicha acción se abrirán las puertas a mayores inversiones en la zona y se reactivará la economía local.
“Cabe destacar que esta aeropista ocupaba el segundo lugar en vuelos a nivel estatal, lo que demuestra su importancia para la conectividad y el desarrollo económico de la región. Ahora es el momento para que la iniciativa privada y el municipio aprovechen esta oportunidad de generar una mayor derrama económica para las y los ciudadanos en general”, dijo Gómez Cazarín.
De resaltar que en dicho acto estuvo presente el alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Franco quien resulta ser uno de los principales activos del PRI para suceder al gobernador Cuitláhuac García Jiménez y quien se dejó de grillas absurdas y realmente puso conciencia social y con alto profesionalismo se acercó al Congreso a gestionar acciones que ayuden y coadyuven a su comunidad.
Ya hay quien compara los dichos y acciones de su dirigente estatal, Marlon Ramírez Marín acusando dineros desaparecidos por el Gobierno Estatal que ya le refutó el secretario de Finanzas y Planeación, José Luis Lima Franco y las acciones en beneficio de los orizabeños de Diez Franco.
Por eso dicen que hay de políticos a políticos.
Al tiempo.
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