El 18 de julio se difundió que el gobierno de Rocío Nahle le había entregado la reparación de 11 tramos carreteros a igual número de empresas, entre las cuales se encuentran dos no veracruzanas, aún cuando la misma gobernadora ha declarado en múltiples ocasiones que se priorizaría a empresas asentadas en la entidad.
Una de las últimas veces que lo dijo fue el 13 de junio, en Tuxpan, en un encuentro con integrantes de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción.
Pero no sólo eso, si no que también esas mismas dos empresas no veracruzanas están señaladas de corrupción y las mismas fueron de las favorecidas en la construcción de la refinería Olmeca.
Estás son esas empresas.
ROCÍO NAHLE ASIGNA OBRAS CARRETERAS A EMPRESAS NO VERACRUZANAS, ACUSADAS DE CORRUPCIÓN Y QUE LES DIERON CONTRATOS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA REFINERÍA OLMECA
La empresa Manufactura Especial y Proyectos Industriales (MEPI), es de las que no están en el padrón de proveedores de la SIOP, tampoco es veracruzana, pero también es una de las señaladas de corrupción.
La otra empresa en las mismas tres condiciones (no inscrita en el padrón de la SIOP, no veracruzana y señalada de corrupción) es Grupo Constructor Industrial Oil & Gas.
Además ambas tienen otra situación en común: tienen como principal accionista a Juan Carlos Tapia Vargas, un empresario hidalguense acusado de huachicoleo y de entregar sobornos en torno al caso Odebrecht.
O sea toda una fichita.
El 10 de marzo de 2017, la entonces PGR inició una investigación por el delito de sustracción ilegal de hidrocarburos mediante una toma clandestina en las instalaciones de la empresa Construcciones Industriales Tapia (CITAPIA), fundada por Juan Carlos Tapia, en el estado de Hidalgo.
Pero, en 2018, PEMEX se desistió de la denuncia y el delito quedó impune.
Aún así el 5 de julio de 2019, CITAPIA fue inhabilitada por la Secretaría de la Función Pública (SFP) para participar en contrataciones públicas de carácter federal, pero Juan Carlos Tapia y su familia constituyeron al menos 4 empresas más, con las cuales brincaron ese impedimento.
La SFP impuso una multa de 206 millones 686 mil pesos a Construcciones Industriales Tapia por presentar información falsa para obtener un beneficio de un contrato con Pemex Refinación.
“Construcciones Industriales Tapia presentó documentación o información falsa o alterada con el propósito de lograr un beneficio o ventaja”, dijo la dependencia.
Igualmente tiene vínculos con Odebrecht, otra empresa señalada ampliamente por hechos de corrupción.
El 27 de marzo de 2017, la Constructora Norberto Odebrecht, subcontrato a Citapia para que realizara servicios de terracería, acondicionamiento del sitio, movimiento de tierras y conformación de plataformas para el proyecto de aprovechamiento de residuales en la Refinería Miguel Hidalgo.
Odebrecht entregó otro subcontrato por 296 millones 782 mil pesos a Citapia por movimiento de tierra y construcción de barda perimetral lado sur para el proyecto de construcción de accesos para el aprovechamiento de residuales en la Refinería Miguel Hidalgo.
La constructora brasileña dio por terminado de manera anticipada el contrato con Construcciones Industriales Tapia, el cual fue suscrito el 21 de diciembre de 2015.
MEPI, en particular, fue registrada el 9 de diciembre de 2020, según relación que presentó el 5 de diciembre de 2020 la hoy diputada Kenia López Rabadam.
MEPI fue creada “a modo” para participar en la obra de Dos Bocas, apuntó Kenia López entonces, en un largo post de X, en el cual mencionaba que de 2019 a esa fecha, se le habían asignado al menos 3 contratos a empresas ligadas con Juan Carlos Tapia, los cuales sumaban más de 400 millones de dólares, dos de los cuales fueron para MEPI, la empresa que ahora traen a hacer carreteras en el estado.
Pero no fueron los únicos contratos.
El 6 de junio de 2023 una nota de W Radio daba cuenta de que entonces ya eran 6 los contratos entregados a MEPI.
El Hidalguense Juan Carlos Tapia, el que ahora parece que se volverá uno de los constructores favoritos del gobierno de Veracruz, se hizo famoso desde el sexenio de Enrique Peña Nieto, cuando se difundió que era parte de la red de corrupción en torno a Emilio Lozoya Austin, cuando este fue directivo en Pemex.
De hecho, el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, señaló a Fabiola Tapia, hermana de Juan Carlos Tapia, de ser pieza clave en el envío de dinero para entregarlo a legisladores federales, recursos que supuestamente eran llevados por el personal que laboraba con ella, y entregados a José Velasco Herrera, jefe de ayudantes del exdirector de Pemex.
Antes de la 4T, Juan Carlos Tapia operaba sobre todo con la que era su empresa insignia, Construcciones Industriales Tapia (Citapia), pero a raíz de la inhabilitación por parte de la SFP comenzó a operar con las 4 empresas recién creadas.
Así, en 2019, PTI Infraestructura de Desarrollo, filial de Pemex, le adjudicó a Mexicana de Recipientes a Presión, propiedad de Juan Carlos Tapia, Gilberto Tapia, Selene Martínez Abarca y Carlos Morín Montes, este último identificado como director jurídico de Citapia, el contrato PTI-ID-S-007/2019 para el paquete 6 de la refinería de Dos Bocas por 78.4 millones de dólares.
Casi un año y medio después de la asignación le cambiaron el nombre a Procesos Especializados y Proyectos (Proesa).
Proesa es la accionista mayoritaria de Manufactura Especial y Proyectos Industriales (MEPI), constituida en diciembre de 2020, y que es la empresa con la que le dan el primer contrato a Juan Carlos Tapia.
Además de Proesa, también son accionistas Procura y Proyectos Oil & Gas (empresa creada en junio de 2020), que es el otro membrete con el que se beneficiara de entrada a Juan Carlos Tapia en este sexenio.
Juan Carlos Tapia, además de los contratos directos que consiguió en la construcción de la Refinería Olmeca, sus empresas también fueron subcontratadas por las megaempresas internacionales Techint y Samsung, de acuerdo con fuentes del sector.
El Grupo Constructor Industrial Oil & Gas, también conocido como GCI, consiguió subcontratos con ICA y Techint en la refinería de Dos Bocas
¿Quiénes podían haber hecho esa recomendación?
Difícil tener certeza.
Como dato, durante la construcción Rocío Nahle era la secretaria de Energía y Leonardo Cornejo Serrano, hoy secretario de Infraestructura y Obras Públicas en el gobierno de Veracruz, era el subdirector de Proyectos y encargado de las contrataciones.
Así, Juan Carlos Tapia pasó de ser un apestado en el sexenio de Peña Nieto, a uno de los contratistas favoritos de la 4T con Andrés Manuel López Obrador, a pesar de sus nexos de corrupción con uno de los villanos favoritos de AMLO, Emilio Lozoya, con Odebrecht, y acusaciones por actos criminales, por el huachicoleo.
A MEPI se le entregó el tramo carretero Tempoal – Tantoyuca, del km 69+000 al km 93+000, y Tantoyuca–Tepetzintla del km 64+000 al km 16+000.
Al Grupo Constructor Industrial Oil & Gas, se le dejó el tramo carretero Huejutla – Platón Sánchez del km 217+500 al 238+500, y de Platón Sánchez – Tempoal del km 238+000 al 260+500.
Así operan los grandes místicos de la política veracruzana de hoy, con empresas ligadas a hechos de corrupción, con las que han tenido tratos antes, y entregándoles contratos directos, sin licitación alguna, ni siquiera simulando que la hacen.