Diciembre es un mes para renovar energía y en ocasiones también para descansar, plataformas como Netflix lo entienden perfectamente, de ahí que para este periodo se hayan reservado los mejores estrenos: “100 años de soledad” basada en la obra maestra de Gabriel García Márquez y Emilia Pérez, una producción francesa que retrata la vida de un Capo que decide cambiar de género.
Previamente la plataforma cautivó a las audiencias con el estreno de “Pedro Páramo” y tanto esta como “100 años de soledad” abarcaron reflectores en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, pues las producciones abarcan un trabajo minucioso de investigación para recrear los escenarios literarios tan aclamados.
Sin duda ambas obras requieren de conocimiento previo de la literatura que les dio origen para poder comprenderlas a mayor profundidad, pero aún sin ello, apreciar los escenarios y diálogos de personajes nos traslada a la mente de grandes autores como Juan Rulfo y Gabriel García Márquez.
Por un lado, en Pedro Páramo vemos un retrato del México revolucionario, la lucha de clases y sobre todo nuestra cultura viva a través de la muerte, el trabajo de escenografía es excepcional al igual que el de vestuario y mediante los diálogos nos trasladamos a todos los lugares comunes que Juan Rulfo quiso dejar en claro como analogías de nuestras comunidades. Esta obra tanto en la literatura como ahora en la pantalla es una joya de nuestro país.
En otra parte contamos con un trabajo arduo para recrear un paisaje único que solo existió para Gabriel García Márquez, donde ahora el realismo mágico cobra vida y más allá de mariposas amarillas podemos envolvernos visualmente en el mundo de Macondo, conociendo a las múltiples generaciones de la familia Buendía.
Y aunado a estas producciones llega como un retrato extranjero de México “Emilia Pérez”, una comedia musical francesa que habla de la vida de un capo que decide cambiar de sexo, esta película lleva 10 nominaciones en los Globos de Oro, fue sumamente aclamada en el festival de Cannes, sin embargo, también ha recibido todo tipo de críticas por el retrato inexacto de México y por el acento de Selena Gómez al hablar español.
Emilia Pérez, sin duda merece cada una de sus nominaciones, pues más allá del acento que puedan tener los personajes, no trata de una película de nuestro país, si bien es cierto que pudo haber más cuidado en la investigación cultural, el eje central de esta producción es el cambio de sexo que realiza Emilia Pérez. Por fin a través del arte comenzamos a ver posicionados temas sociales, es ahí donde está el verdadero punto de discusión, pues si seguimos poniendo atención a puntos triviales para la trama, seguimos reflejando las acciones cotidianas de nuestra sociedad, donde omitimos lo importante y perpetuamos estereotipos que dejan fuera la gran diversidad.
El séptimo arte constantemente se debate entre atender las críticas con tal de preservar la fama, sin embargo, no hay duda alguna de que las obras que llegan a las grandes pantallas también forman parte de nuestra educación y comprensión cultural, cualquier historia que llega a popularizarse masivamente es un referente incluso para generaciones futuras de lo que estamos haciendo hoy.
Así que si aún no has visto alguna de estas producciones, este es el momento de hacerlo y formar al respecto tu propio criterio de si estas creaciones son obras maestras o simplemente ganaron la fama por la popularidad de su elenco.