*Delincuencia da al traste con la fuerte promoción turística
*Si los mexicanos construyeron EU, porque no se los traen
TRAS LOS recientes asesinatos cometidos por grupos delincuenciales a lo largo del Estado, sobre todo en la zona norte donde las atrocidades y masacres en cárceles veracruzanas y fuera de estas, han colocado a la Gobernadora Rocío Nahle en el sótano de la impopularidad, se hace necesario que la mandataria Estatal, haciendo a un lado el discurso autoritario y retador, realice cambios en su gabinete, sobre todo en áreas álgidas como la Dirección de Desarrollo Municipal, dependencia cuya función sería estar un paso adelante de los sucesos que afectan al solar jarocho, a partir de información confiable que permita la toma de decisiones sin tanta alharaca o alboroto, ya que la seguridad es un trabajo que requiere de inteligencia sustentada en informes confiables. Y es que no tiene el Gobierno del Estado, al menos en estos momentos, un departamento que acopie o recolecte información proveniente de al menos cuatro o cinco cortes informativos diariamente procedentes de agentes encubiertos que lo mismo podrían ser boleros, meseros, taxistas, elementos de tránsito, policías municipales o del Ipax y grupos sociales que estén dispuestos a jugársela por Veracruz. No hay cedulas individuales de personajes sospechosos y sus actividades cotidianas, de opositores o de aquellos que representen un riesgo para la gobernanza y, consecuentemente para el Estado de Derecho. Insistimos: con discursos autoritarios sustentados en el yoyismo no se resuelve nada. Hay que olvidarse por un tiempo de las fiestas, del desinterés y de la vida cómoda, y sentarse a arrastrar el lápiz recurriendo a personajes que conozcan los diferentes mosaicos que integran a Veracruz, sobre todo con especialidad en investigación científica y análisis profundo de los acontecimientos, de tal suerte que sin mucho anuncio se llegue con discreción a los objetivos. Las cárceles, sin duda, juegan un papel determinante, ya que allí se encuentran muchos líderes delincuenciales y reclusos de alta gama que estarían dispuestos a colaborar en base a acuerdos cuya batuta la llevaría el Gobierno y no ellos. Pero contrario a lo anterior, pareciera que Veracruz a nadie le importa, en tanto grupos delincuenciales han decidido tomar el pulso de los nuevos Gobernantes cometiendo atrocidades para sembrar terror.
YA EL Gobierno Federal ´se tentó´ el corazón y envió a 300 soldados e integrantes de la Guardia Nacional (que para el caso es lo mismo) a “garantizar” la seguridad del antiguo Puerto México, una ciudad que ha enfrentado infinidad de barbaries, como la masacre en 2019 provocada por un ataque armado y con bombas molotov a un centro nocturno conocido como “Caballo Blanco”, en Coatzacoalcos, aquella fatídica la noche del 27 de agosto de 2019, escenario en el murieron violentamente 30 personas: 20 hombres y 10 mujeres junto a 11 heridos. Los 300 militares y Guardias Nacionales, como en la épica Batalla de las Termópilas, cuando 300 espartanos encabezados por el rey Leónidas lucharon contra un ejército persa mucho mayor, van a Coatzacoalcos a frenar la ola de violencia que afecta directamente a comerciantes, transportistas, industriales y ciudadanos del sur del estado, transmutando a aquel Puerto o en un pueblo fantasma, con negocios cerrados, familias completas que han abandonado la ciudad y negocios saqueados o quemados, aunque el problema no solo se manifiesta en el sur de la Entidad donde la violencia está desbordada, sino, ahora, mayormente en el Norte del Estado, donde además de la maestra y taxista de Álamo asesinada por un grupo armado y la desaparición de otra mujer –el mismo día que la primera- cuyo cuerpo fue localizado semienterrado bajo un naranjal, se suman 8 reclusos masacrados y 13 heridos durante un motín en contra del mismo grupo delictivo, y para variar ahora se agregan cuatro cuerpos descuartizados y abandonados sobre la carretera estatal Poza Rica-Cazones, a la altura del municipio de Papantla, con un ‘narcomensaje’ aterrador. Es ahí donde hace falta asegurar la tranquilidad de los habitantes, porque pareciera que el grupo delincuencial está poniendo a prueba a la Gobernadora Rocío Nahle y a su equipo de seguridad, algo que no debe permitir bajo ninguna circunstancia, y menos aun cuando, acaso sin desearlo, trató de atenuar el impacto que provocó el secuestro, tortura psicológica y física de la profesora, aduciendo que había muerto por infarto, cuando el crimen fue provocado por la violencia ejercida contra su persona tras ser amenazada por una docena de metralletas y pistolas que le apuntaban, mientras lanzaba un mensaje que previamente le ordenaron.
VERACRUZ ESTA de moda, pero no por sus atractivos turísticos que son muchos, ni por la promoción que le hace la Gobernadora Rocío Nahle tanto en España como en todos los festivales locales, sino por la violencia que cada día se expande y adquiere tonalidades de terror, por los anuncios recientes de que un grupo delincuencial se apoderará de las cárceles de la Entidad para hacer el trabajo que el Gobierno no se atreve, y no porque no quiera, sino porque se favoreció a amigos, compadres y aliados con puestos claves, sin la mínima experiencia en la materia y, más bien, totalmente neófitos que lejos de aportar ideas o proyectos viables, solo están ocupando un sitio que no devengan por ignorancia. Urge por lo tanto que de manera gerencial la Gobernadora reemplace a lo que no está dando resultados, ya que tanto en la dirección de desarrollo político como en el instituto veracruzano de la vivienda los cargos se dieron a partir de un intercambio entre altos funcionarios. Tu mete a este y yo meto al que me indiques, y los resultados están a la vista. Nahle debe recurrir a expertos para cambiar buena parte de su gabinete, y no imponer a amigos o intereses, ya que Veracruz no merece el destino que está viviendo. No hacerlo sería llevar al Estado al fracaso.
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INSISTE LA presidenta Claudia Sheinbaum en que las y los migrantes mexicanos han construido Estados Unidos y, “si no fuera por su trabajo, ese país no sería lo que es hoy”, y lo dice con tal ahínco que hasta se le cree. Y uno se pregunta: si eso es así, ¿Por qué la mandataria nacional no lanza una gran convocatoria en Estados Unidos para que todos los paisanos que están allá se retornen al terruño, y coadyuven a hacer grande a México?. Estamos seguros que, de hacerlo, muchos se devolverían ipso facto a su patria, conscientes de que con las Becas para el Bienestar tendrían más que suficiente para vivir. Y es que, una y otra vez reitera que México “se escribe con M de migrante” y subraya que los migrantes “no solo ayudan, sino que han construido Estados Unidos”, lo que no deja de ser un chiste digno de Chuponcito. Tal vez ignore la Presidenta que, inicialmente España, Francia y Gran Bretaña establecieron colonias en América del Norte, cada una con sus propias dinámicas de colonización y relaciones con los pueblos indígenas. Luego llegaron forzadamente africanos como esclavos a las colonias británicas, lo que contribuyó significativamente a la economía y desarrollo de la región, aunque a un costo humano inmenso, y a ellos se sumaron millones de inmigrantes de diversas partes del mundo en busca de oportunidades y una nueva vida, contribuyendo a la diversidad cultural y económica de aquel país. Figuras como Cornelius Vanderbilt, John D. Rockefeller, Andrew Carnegie, JP Morgan y Henry Ford fueron quienes lideraron la revolución industrial, construyendo imperios económicos que transformaron a la nación, mientras que un grupo selecto de líderes políticos, como John Adams, Benjamin Franklin, Alexander Hamilton, John Jay, Thomas Jefferson, James Madison y George Washington, establecieron las bases políticas y legales de la nación. Los mexicanos y otros migrantes de centro y Sudamérica llegaron en calidad de trabajadores, casi esclavos, porque en sus naciones no encontraron apoyo de sus gobiernos, pero no como empresarios o políticos que hayan dado lustre a EU. Así las cosas. OPINA carjesus30@hotmail.com
