* ¿Quién es el responsable de que en Veracruz la vacunación fuera muy baja?
* Cuitláhuac García, mintió, casi el 30% de los adultos del estado, sin vacuna
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
El 5 de octubre, durante la conferencia mañanera que se realizó en Veracruz, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, muy ufano, prometió que para el 20 de octubre todas las personas mayores de 18 años estarían vacunados en el estado con al menos una dosis contra la Covid-19.
Pero fracasó estruendosamente, porque aún ahora, hay municipios en los que no se ha aplicado ni siquiera la primera dosis a jóvenes de 18 años y más.
Por eso es que Veracruz es el cuarto peor estado con índices de vacunación en el país, con apenas un 72% de la inmunización aplicada a los mayores de 18 años, muy por abajo del promedio nacional que fue de 83%.
El cuarto peor índice de vacunación, con 72%; los otros tres peores fueron Oaxaca, con el 69%, Guerrero, con el 72% y Chiapas, con el 60% de su población mayor de edad vacunada.
Un contraste muy notable con la Ciudad de México que alcanzó el 99% por ciento de la cobertura y Quintana Roo el 96%
Cuitláhuac García quería convencer al presidente repitiendo una y otra vez que para el 20 de octubre ya estaría terminada la vacunación en todos los municipios del estado.
“La Antigua, Puente Nacional y Tlalixcoyan serían los últimos tres y están programados del 18 al 20 de octubre, el día 20 de octubre es la última fecha en que se programó y con esto concluiríamos”, dijo, para enfatizar en la fecha en que terminarían.
Lo dijo mientras veía a López Obrador y ponía cara de falsa modestia.
Roberto Ramos Alor sonreía pensando tal vez que por su “eficiente trabajo” hasta lo podrían hacer funcionario del Insabi o de la Secretaría de Salud.
Pero el 20 de octubre no pusieron ninguna vacuna ni en La Antigua, ni en Puente Nacional.
Para el 20 de octubre apenas invitaron a los jóvenes de 18 años a inscribirse para recibir la inmunización.
Es más, hay más de 50 municipios en los que todavía no lanzan ni siquiera la convocatoria para aplicar la vacuna antiCovid-19.
¿Ejemplos?: Acajete, Acatlán, Actopan, Acula, Acultzingo, Agua Dulce, Alpatláhuac, Alto Lucero, Altotonga, Amatitlán, Amatlán de los Reyes, Angel R. Cabada…
Ahí está en la página de Sesver y lo pueden ver si es que todavía no lo quitan (https://www.ssaver.gob.mx/blog/2021/10/18/primera-dosis-contra-covid-19-para-la-poblacion-de-18-a-29-anos-en-la-antigua-y-puente-nacional-2/ ).
Es más, hoy, 2 de noviembre, 12 días después, todavía no vacunan a los jóvenes de 18 años y más, al menos en esos dos municipios.
Roberto Ramos Alor, el secretario de Salud de Veracruz, le mintió a Cuitláhuac García en la programación y el gobernador le repitió la mentira al presidente.
Por cosas como esa es que el presidente ya no dice que Cuitláhuac es honesto, por lo menos, y por las que lo regaña cada vez con más frecuencia.
¿Una muestra del alejamiento presidencial evidente hacia Cuitláhuac García?.
Ese 5 de octubre la única vez que lo mencionó fue para “agradecer”… “por su hospitalidad, por su apoyo”.
Y nada más.
Ahí están las grabaciones como testimonio.
Tal vez López Obrador ya estaba enterado del grave rezago que había en el estado en la aplicación de las vacunas contra la Covid-19 y por eso no le dijo nada a Cuitláhuac García cuando terminó de vanagloriarse sin fundamento.
Y la situación no fue peor por las instituciones externas que trabajaron en la vacunación, como lo reconoció el mismo gobernador, cuando mencionó que el ejército, la Secretaría de la Defensa Nacional “aquí en Veracruz” cumplió con su objetivo de manera sobrada: “no solamente hicieron 100, se aventaron 113” municipios rurales.
Pero mientras otros trabajaban con intensidad, Roberto Ramos y el gobierno de García Jiménez lo hacían con descuido.
Por eso no se cumplió, por eso Veracruz es uno de los estados con más bajo nivel de vacunación en el país.
La culpa es del gobernador y de su secretario de Salud, nada más.
Por deficiencias como esta es que de nuevo surgen los rumores de que Cuitláhuac García podría dejar el cargo para que se designe a una personas más capaz, que pueda componer el barco.