Hace unos días con pleno desconocimiento del tema, el candidato a la Gubernatura por el Movimiento de Regeneración Nacional, Cuitláhuac García Jiménez declaraba irresponsablemente que el Gobierno de Veracruz y la misma Fiscalía General habían perdonado a Javier Duarte, y que hasta existía cierta complicidad entre ellos.
García, tratando de sacudirse el tema del Duartismo que aún lo persigue; porque es bien sabido que el ex mandatario financió totalmente su anterior campaña, declaró necedades sin imaginar que el propio fiscal Jorge Winckler Ortiz maquinaba una jugada que se concretó el día de ayer contra el propio “Javidú” en la Ciudad de México.
De esta forma, el Fiscal logró cerrar las bocas de muchos, principalmente la del paladín de MORENA, obteniendo él y su equipo que el ex gobernador veracruzano, continúe preso en el Reclusorio Norte, gracias a las órdenes de aprehensión giradas ahora por un Juez de Pacho Viejo.
Pero muchos dirán: ¿Qué importancia tiene esto si Duarte ya está encarcelado?
Le explico.
En el extremo de que los abogados del oriundo de Córdoba lograran destrabar los asuntos federales, Duarte seguiría enfrentando un proceso anexo por los presuntos delitos de incumplimiento del deber legal, peculado, tráfico de influencias y coalición, acciones logradas por procesos penales girados por la misma FGE, ejecutándose como medida cautelar la prisión preventiva, estableciéndose así el próximo 20 de mayo como la fecha para llevar a cabo la audiencia de vinculación.
Incluso, nos cuentan que en esta audiencia inicial, al ex mandatario no le fue para nada bien, que Duarte estaba inquieto e iracundo. Y como no, si ahora sí se estaba enfrentado a los verdaderos arquitectos de su encarcelamiento.
Y es que a diferencia de otras audiencias de asuntos imputados por la Procuraduría General de la República y donde la defensa de Duarte se movía holgadamente, el día de ayer las negativas fueron una constante. Y tal y como lo explica el portal “Animal Político”, a Javier y a sus abogados se le hicieron varios llamados de atención, ya que el ex jefe del ejecutivo veracruzano una y otra vez quería saber los puntos al detalle, sobre las 80 pruebas presentadas en su contra, así como el señalamiento de haber emitido en el 2014 una orden de transferencia de 220 millones de pesos etiquetados a la Comisión de Agua del Estado de Veracruz, y un largo etcétera.
Es más, sabedor de que estaba cerca la primera victoria de Jorge Winckler Ortiz, el periodista Arturo Ángel comentó que el imputado y sus abogados intentaron que no se dictara una medida cautelar bajo el argumento de que Javier Duarte ya estaba preso. Sin embargo, el juez rechazó la solicitud, precisándose de que si el exgobernador quedara libre del asunto federal entonces se tendría que volver a estudiar la medida dictada en este nuevo caso.
En fin, por lo pronto el ex gobernador enfrenta diferentes casos en su contra, y como se comentó en redes sociales para el cordobés todavía hay mucho “tambo” para rato.
Ya veremos qué es lo que pasa, por lo pronto los puntos se los llevan los integrantes de la Fiscalía General de Estado, quienes evidentemente ejecutaron un muy buen trabajo.
@IvanKalderon
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