* La CMAS de Xalapa debe casi 340 millones de pesos

* Ahued nunca demandó a empresa que incumplió y en cambio hubo que pagarles a ellos

Marco Antonio Aguirre Rodríguez

La crisis en Xalapa del agua potable y del saneamiento de las agua negras proviene desde el siglo pasado.

Pero la culpa de que hoy éste problema prevalezca, es de Ricardo Ahued Bardahuil, el presidente municipal de Xalapa actual, porque en 2004 y 2005, en su primer periodo como alcalde de Xalapa, no tuvo la fuerza para interponer una demanda por incumplimiento de contrato contra un consorcio de constructoras y en cambio, propició que ese grupo empresarial demandase incumplimiento de contrato y el pago de lo acordado, y que ganase el juicio.

O sea, que todo le salió mal.

Mediante solicitudes de acceso a la información, ni el ayuntamiento de Xalapa ni la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento de Xalapa (CMAS) tienen registro de que alguna vez se haya denunciado a la empresa que incumplió en 2003 con las obras para las que fue contratada, ni tampoco se ha demandado a ninguna otra compañía que haya incumplido algún contrato con CMAS.

A raíz de eso, hoy la Comisión tiene un adeudo de casi 340 millones de pesos con Banobras, pero no la infraestructura que se debió construir.

Hoy Ricardo Ahued se queja de que el déficit de agua en Xalapa es de 40 por ciento sobre la demanda y que “nosotros recibimos un organismo operador del agua y una ciudad que tiene 40 por ciento de deficiencia en el suministro, por eso los estiajes”, de acuerdo con lo publicado en una nota de La Jornada Veracruz de hace un año, del 10 de junio de 2023.

Pero de que esto sea así, él tiene la mayor parte de la culpa.

Pero vamos por partes.

EL INICIO DE LA DEUDA DE LA CMAS

De acuerdo con la misma página de CMAS en su apartado “¿Qué es CMAS Xalapa?”, “en el 2003 el alcalde de Xalapa, Lic. Reynaldo Gaudencio Escobar Pérez, anunció durante el tercer Informe de Gobierno, el “Plan Xalapa 2022 una visión del futuro”, y expuso que con dicho plan, fijará las bases para la instauración de una planeación estratégica para el desarrollo integral de la capital del Estado”.

“Es así como nace el Plan Integral de Saneamiento de la Ciudad de Xalapa; donde se habrán de construir y poner en operación 77 kilómetros de 9 colectores y emisor red de alcantarillado que se conectará a una planta de tratamiento de aguas residuales y resolver así un rezago de 20 años. De esta manera, en dos años se pasará de 62 al 80 por ciento en materia de cobertura de alcantarillado sanitario, en beneficio directo de 200 mil habitantes de 54 colonias, e indirecto de toda la población”, se asienta ahí mismo (https://cmasxalapa.gob.mx/que-es-cmas/).

Pero Reynaldo Escobar no lo hizo por que tuviera una visión para mejorar las condiciones de la ciudad, si no que fue una reacción para eludir una multa multimillonaria de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) porque se detectaron niveles de contaminación más allá de lo permisible en los ríos Sedeño y Carneros.

Con la visión también del negocio que se podría hacer, Reynaldo Escobar creó su Plan Integral de Saneamiento de la Ciudad de Xalapa, que incluía lo que se describe en el documento ya mencionado: 77 kilómetros de 9 colectores y emisor red de alcantarillado, en 58 colonias, y una planta de tratamiento de aguas residuales con capacidad de 750 litros por segundo, que se ubicaría en El Lencero, con un gasto proyectado de 541 millones 845 mil 855 pesos.

El proyecto incluía aportaciones de Banobras por 216 millones de pesos y el contrato para hacer los trabajos se le dio a Aguas Tratadas de Xalapa SA de CV, un consorcio conformado por Earth Tech, Arquitectos Aguayo, pero sobre todo Caabsa Constructora.

Pero ATX incumplió el contrato.

Y Reynaldo Escobar en lugar de exigirles que hiciesen las obras, los dejo actuar a su gusto y conveniencia.

Eso sí, les hizo la rescisión de contrato de prestación de servicios número CMAS-SR-006-2003 de fecha 3 de septiembre de 2003, pero no fue más allá.

Ni siquiera reclamó los adelantos ya pagados por 48 millones de pesos.

LA CRISIS DEL SISTEMA DE AGUA Y SANEAMIENTO DE XALAPA, CULPA DE AHUED

Reynaldo Escobar después de ser alcalde de Xalapa se convirtió en el poderoso secretario de Gobierno con Fidel Herrera.

Con todo ese poder, en lugar de presionar para que ATX cumpliese con lo pactado, lo que hizo fue “recomendarle” al alcalde Ricardo Ahued que denunciase al consorcio empresarial.

Para el 2005, cuando Ricardo Ahued toma la presidencia municipal de Xalapa, Reynaldo Escobar ya le había entregado 48 millones de pesos a ese consorcio como parte del anticipo.

Así, en 2005 en su primer periodo como presidente municipal de Xalapa, Ricardo Ahued lo único que hace con respecto al incumplimiento de ATX es reclamar en los medios informativos esto y amenazar que los va a denunciar.

Pero nunca lo hizo.

La publación Bnamericas con fecha 25 de mayo de 2006 recupera una nota de Milenio que recogió la declaración del entonces alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued, de que “las acciones legales en contra de ATX continuarán”.

Pero nunca emprendió ninguna acción legal en contra de esa empresa, ni desde el ayuntamiento de Xalapa, ni desde la CMAS.

LAS SOLICITUDES DE ACCESO A LA INFORMACIÓN QUE MUESTRAN QUE NO HUBO DEMANDA CONTRA ATX

Tanto al ayuntamiento de Xalapa como a la CMAS se les pidió mediante solicitud de acceso a la información:

«Situación de denuncia interpuesta contra Aguas Tratadas de Xalapa (ATX) por incumplimiento de contrato, de obra o cualquier otra circunstancia..

Situación de demandas en curso o resueltas, iniciadas a partir de 2003 por cualquier causa referentes a obras para surtir agua entubada a la ciudad de Xalapa o el saneamiento de las aguas negras».

El ayuntamiento de Xalapa mediante respuesta simplemente argumentó que “cuando la información no se encuentre en los registros o archivos del sujeto obligado, su Unidad de Transparencia lo notificará al solicitante” y «orientó» a que la solicitud se presentase ante la CMAS.

CMAS por su parte asentó que “en los archivos físicos así como electrónicos” no tenían información al respecto.

Es decir, simple y llanamente, tanto en el ayuntamiento, como en la Comisión se reconoce que nunca se interpuso demanda alguna contra ATX ni contra alguna otra compañía que haya incumplido los compromisos contraídos con la CMAS.

Y esa, la demanda, fue una acción que le tocaba realizar a Ricardo Ahued.

Pero que no hizo.

PERO EN CAMBIO HUBO QUE PAGARLE A ATX

Pero en cambio ATX demandó el incumplimiento del contrato y demandó el pago del mismo, aún cuando no realizó las obras.

A la vez ya corrían los intereses y el pago del capital que se tenía que hacer a Banobras.

Esto llevó a que David Velasco Chedraui, tuviera que pedir un refinanciamiento de la deuda con Banobras por la cantidad de 476 millones 800 mil pesos, que tiene como fecha de vencimiento el 30 de septiembre de 2034.

Es decir que a este 11 de julio faltan 10 años 2 meses y 19 días para que se termine de pagar.

LA CMAS DE XALAPA DEBE CASI 340 MILLONES DE PESOS

El refinanciamiento se firmó el 8 de octubre de 2007, con afectación al Fondo General de Participaciones y se publicó en la Gaceta Oficial del gobierno de Veracruz el 17 de agosto de 2007.

Por esa deuda, hoy CMAS debe casi 340 millones de pesos, de acuerdo con lo asentado en el Registro Público Único de Financiamientos y Obligaciones de Entidades Federativas y Municipios, de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Son 339 millones 902 mil 290 pesos, según ese Registro al primer trimestre de 2024.

Para tener una idea del monto del endeudamiento, baste decir que el ayuntamiento de Xalapa hoy debe 100 millones de pesos.

90 millones 232 mil 361 pesos por una cuenta y 9 millones 900 mil 382 pesos en otra más.

Siendo alcalde electo, Ricardo Ahued aseguró que al tomar posesión del cargo auditoría a la Comisión y crearía un plan para sanear sus finanzas y detectar irregularidades que puedan poner en riesgo su funcionamiento, además de enfrentar el pago de este crédito que se ha convertido en una carga financiera para el municipio.

Pero a casi 3 años de funciones, no lo hizo.

El 10 de junio de 2023, como alcalde de Xalapa, Ahued Bardahuil culpó no al pasado, si no a quienes le sucedieron en la presidencia municipal después de su primer gobierno, de la gran deuda que tiene hoy la CMAS.

Aseguró que cuando finalizó en 2007 su primer periodo como presidente municipal, la deuda con Banobras debió liquidarse en 2 años, cuando mucho, pero se prolongó debido a “puras transas” de quienes le sucedieron, y a una mala renegociación.

“Hicieron las administraciones cuando yo me fui puras tranzas. Renegociaron mal, patearon la deuda porque había una visión, privatizaron Medellín, Boca del Río y querían privatizar (la CMAS) Xalapa, yo me opuse como diputado local con las consecuencias que sufrí y sin embargo se salvó el organismo de Xalapa”.

La reestructuración del pasivo, afirmó ese día, se realizó de manera ilegal y a una tasa de interés de 11.45 por ciento.

Ese 10 de junio apuntó que como como consecuencia, CMAS paga 6 millones de pesos por mes a Banobras, pero además no se puede pagar la deuda por adelantado, porque penalizan esto.

Pero ya casi se va, por el anuncio de que será secretario de Gobierno, y nada hizo par resolver el problema.

O si algo hizo, no dio buenos resultados.

Aunque tal vez desde la nueva posición pueda maniobrar de alguna forma en favor de Xalapa, ahora sí.

Pero, ¿lo hará?.

PENDIENTES LAS OBRAS QUE XALAPA NECESITA PARA ABASTO DE AGUA Y DRENAJE

Desde 2008, con David Velasco, los problemas de abasto de agua en Xalapa comenzaron a incrementarse.

Elizabeth Morales, como alcaldesa de Xalapa para no tener que hacer obras de infraestructura se fue por la solución fácil:

Instaurar los “tandeos” o la entrega de raciones de agua por día a las colonias de Xalapa.

En junio de 2010, la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) puso en marcha el “programa de movimientos de válvulas para el mejor aprovechamiento de agua potable”.

Y esos tandeos se mantienen hasta la fecha.

Pero en este 2024 el abasto de agua hizo crisis y se dejó sin surtir el liquido a diversas colonias por tiempos prolongados, que algunos habitantes acusaban que duraban hasta 20 días.

A la fecha no hay ningún proyecto para incrementar el abasto de agua potable a Xalapa.

El exalcalde morenista Hipólito Rodríguez dijo que iba a realizar infraestructura para recolectar agua de lluvia, pero nunca le dio forma al proyecto.

Las administraciones emanadas de Morena vaya, ni siquiera han hecho algo que se diga que es para aprovechar el liquido.

Pero además, cada mes, se van miles de litros sin tratamiento alguno, que podrían recuperarse para reuso en la ciudad, porque tampoco existen las plantas de tratamiento adecuadas para ello.

¿La culpa?.

Todos se la echan a la deuda.

Incluso las altas tarifas que se tienen en la zona son por culpa de la deuda.

Ese mismo 10 de junio del año pasado, Ahued Bardahuil aseguró que se requerían más de mil 500 millones de pesos de inversión para atender el abasto del vital líquido en la capital del estado, pues actualmente la cobertura de la demanda es de apenas 60 por ciento, además de que se abastece al municipio de Emiliano Zapata.

En ese entonces dijo que analizaban con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) alguna opción para contar con otra fuente de abastecimiento del líquido para Xalapa.

Un año después de la declaración, todavía no encuentran cual puede ser la nueva fuente de abasto.

En este 2024 por carencia de agua, incluso algunas escuelas de la capital del estado suspendieron clases, por lo insalubre, como el jardín de niños Narciso Mendoza y la primaria Álvaro Obregón.

A la par Ricardo Ahued asegura que el precio por metro cúbico de agua en Xalapa es de los más bajos del país, pero hay una queja generalizada por los altos cobros que hace la CMAS.

Por cierto, hasta ahora, nunca se ha presentado un balance de las cuentas de la institución que muestre cual es el real estado financiero de la misma.

Ricardo Ahued quiere dejar de ser el gran místico de Xalapa para convertirse en uno de los grandes místicos del estado, pero hasta ahora, el menos en materia de agua potable y drenaje, ha dejado mucho sin resolver.